¿Qué es un filtro de arena lento?

Un filtro de arena lento es un filtro de tratamiento de agua que puede tratar el agua de manera económica y eficiente para eliminar organismos no deseados y otros materiales. Los filtros de arena lentos tienen una serie de ventajas en entornos donde el acceso a la tecnología puede ser limitado y las comunidades necesitan un sistema de filtración confiable que dure un período de tiempo prolongado. Dependen de un lecho de roca y arena cuidadosamente construido. Este material está cubierto con una estera de microorganismos beneficiosos, conocida como Schmutzdecke, que actúa para filtrar el agua a su paso.

Estos filtros no requieren bombeo eléctrico ni tratamiento químico. Una comunidad puede establecer un lecho de filtración de tamaño apropiado y puede usar alimentación por gravedad para bombear agua terminada a un tanque de almacenamiento. Los filtros de arena lentos funcionan continuamente y, por lo tanto, es necesario un método para recolectar y almacenar de manera segura el agua tratada. El bajo costo y la baja tecnología pueden ser adecuados para entornos como comunidades en el mundo en desarrollo que no pueden soportar la infraestructura de una planta de tratamiento de agua más compleja.

La construcción de un filtro de arena lento comienza con desagües en la base del lecho del filtro, cubiertos con una capa de grava suelta. Luego viene una capa de arena en la que pueden crecer los microorganismos beneficiosos. Crean una torta de filtración a través de la cual debe pasar el agua para llegar a los desagües. Los operadores pueden verter agua sin tratar en la parte superior y el agua limpia fluye por los desagües. Con el tiempo, la torta de filtración puede eventualmente obstruirse y es necesaria una limpieza manual para que el filtro de arena lento vuelva a funcionar.

Una desventaja de este método de tratamiento está implícita en el nombre: los filtros de arena lentos funcionan lentamente. El agua puede tardar mucho en atravesar el sistema, especialmente a medida que la torta de filtración comienza a volverse más densa. Las comunidades con grandes necesidades de agua pueden necesitar un lecho de filtración extremadamente grande que podría resultar logísticamente imposible de construir y mantener. Esto puede ser una preocupación para las comunidades en crecimiento que pueden agotar sus suministros de agua ya que superan la capacidad del filtro para tratar el agua.

Las pruebas de los sistemas de filtros de arena lentos muestran que pueden ser muy fiables cuando se instalan y mantienen correctamente. Es importante revisar el agua tratada periódicamente para identificar organismos o productos químicos potencialmente dañinos que pueden estar deslizándose si el filtro no funciona completamente. Si el filtro falla, puede que sea necesario reconstruirlo desde cero. Un consultor puede evaluar el filtro de arena lento y los resultados de las pruebas para determinar los mejores pasos a seguir.