Un pulidor de prensa es un tipo de brillo o acabado que se crea al poner un material en contacto con algún tipo de metal liso, usando calor y presión para crear la apariencia brillante. Se puede utilizar un enfoque de pulido a presión para crear un acabado suave y brillante en diferentes tipos de láminas de plástico y productos similares que luego se utilizan para fabricar diversos productos de plástico. El término también se utiliza en relación con diferentes tipos de mezclas de tejidos, en los que se utilizan calor y presión para proporcionar brillo al material acabado.
La clave para crear un brillo de pulido de prensa es la aplicación adecuada de presión y calor a la superficie del material que se está sometiendo al tratamiento. En el caso de los plásticos, esto suele significar poner el producto en contacto con algún tipo de lámina metálica o rodillo que se calienta a una temperatura determinada. El dispositivo de metal se aplica al plástico, a veces con una prensa directa o haciendo rodar el metal sobre la superficie del plástico. En ambos enfoques, la presión y el calor se controlan cuidadosamente para lograr el nivel adecuado de brillo.
Se adopta un enfoque similar al producir el pulimento de prensa sobre tela. Normalmente, este tipo de proceso de acabado se aplica a la tela antes de cortarla en cualquier tipo de secciones, lo que permite lograr un brillo uniforme para todo el lote o lote del material. El ajuste de calor debe ser suficiente para trabajar con la presión aplicada para lograr el efecto deseado, pero no tan caliente como para dañar las fibras del material. El resultado final es un material resistente y con un ligero brillo que se considera atractivo.
Una vez que se logra un pulido a presión, el material puede tratarse más para sellar el brillo, aunque esto no es necesario con todos los productos. Por lo general, la creación del esmalte no afecta la integridad o la solidez del producto terminado. Esto significa que es posible crear hojas de pulido de prensa que cumplan con todos los estándares de calidad establecidos para ese tipo de producto, con la ventaja adicional del atractivo lustre de la superficie.
Hay una serie de empresas en todo el mundo que se especializan en la producción de productos de pulido a presión, incluidas láminas de plástico y varios tipos de telas livianas y pesadas. En las últimas décadas, los avances en la tecnología han hecho posible controlar con mayor precisión el grado de calor y presión utilizados en el proceso, generalmente utilizando tecnología informática para monitorear el proceso en tiempo real y hacer ajustes inmediatos en la presión y el calor como medio. de conformidad con los estándares establecidos para ese proyecto en particular.