Los conductos de calefacción, ventilación y aire acondicionado (HVAC) son grandes tubos o tuberías que recorren la infraestructura de una casa o edificio. Estos conductos están conectados a una unidad principal de calefacción o refrigeración y llevan aire por todo el edificio. Para mantener un flujo de aire adecuado, que permite que todas las áreas de un edificio se calienten o enfríen por igual, el tamaño de estos conductos debe determinarse de una de las pocas formas muy específicas. Estas formas incluyen el método Manual J, un método que implica conocer la temperatura deseada de una habitación y un método que implica el uso de un ductulador para realizar cálculos.
El diseño existente de una casa o edificio juega un papel importante en el tamaño adecuado de los conductos de HVAC. Se debe tener en cuenta el tamaño de cada habitación que necesitará un conducto, junto con la forma en que los conductos deben instalarse en las paredes. Siempre se recomienda instalar conductos lo más cortos posible, pero los diseños de los edificios no siempre permiten que esto suceda. Determinar los tamaños de los conductos, la capacidad física de la unidad, implica tener en cuenta cuánto tiempo se deben aplicar restricciones de diseño al conducto.
El primer método de dimensionamiento de conductos de HVAC es lo que se llama Manual J. Este método, que generalmente lo realiza un contratista profesional, implica el uso de un programa informático y las especificaciones técnicas de la unidad de calefacción o refrigeración en cuestión para determinar el conducto de HVAC adecuado. requisitos de dimensionamiento para un edificio. Este software está diseñado para ser lo más preciso posible desde el punto de vista técnico y tiene en cuenta aspectos como el flujo de aire existente, el tamaño de la carga de la unidad de calefacción o refrigeración y la temperatura de diseño general del lugar en cuestión. El método Manual J fue desarrollado por Air Conditioner Contractors of America (ACCA).
Es más probable que el segundo método de dimensionamiento de conductos de HVAC sea utilizado por los propietarios de viviendas que intentan manejar el dimensionamiento ellos mismos. Implica encontrar información como la temperatura ideal en cada habitación, los pies cúbicos por minuto de cada habitación y las unidades térmicas británicas promedio (Btus) del sistema HVAC para determinar el tamaño adecuado del conducto HVAC. El diseño de los conductos también influye en la determinación del tamaño que deben tener.
Un tercer método para dimensionar los conductos de HVAC implica el uso de un dispositivo llamado ductulador. Este es un dispositivo que permite al usuario ingresar ciertos cálculos sobre las áreas donde se instalarán los conductos de HVAC, como el volumen y la velocidad del aire, y utiliza esa información para generar los tamaños adecuados de los conductos de suministro y retorno. Las instrucciones sobre cómo realizar estos cálculos en una habitación a menudo se incluyen con el dispositivo ductulador.