Un dashpot es un dispositivo mecánico que aplica fricción a un objeto para restringir la velocidad de su movimiento. Este proceso normalmente se logra por medio de un resorte y algún tipo de lubricante interno que aplica una presión resistiva que contrarresta la fuerza generada por el objeto cuando se pone en movimiento. Normalmente también hay un ajuste presente en un tablero de instrumentos para establecer la cantidad de contrafuerza durante la operación. La idea principal detrás de la instalación de un dashpot es evitar que las piezas se golpeen entre sí a altas velocidades y causen daños sin sentido.
Uno de los ejemplos más comunes de un sistema dashpot se puede encontrar instalado en puertas dentro de hogares y negocios en todo el mundo. El dispositivo permite que la puerta se abra sin obstáculos, pero una vez que se suelta, se cerrará muy lentamente debido al resorte interno que contrarresta el tirón natural de la gravedad. Este tipo de opción es especialmente popular en puertas con paneles de vidrio elaborados que podrían agrietarse o romperse si el objeto se cierra de golpe con demasiada fuerza; también se implementa en modelos relativamente económicos para garantizar que cierren correctamente. Para comprender mejor la física detrás de un resorte del amortiguador, las personas pueden intentar aplicar fuerza a la puerta mientras se cierra para comprender cuánta resistencia puede proporcionar el dispositivo relativamente simple.
Básicamente, hay dos tipos de dashpots comúnmente disponibles; lineal y rotatorio. El ejemplo anterior describe un dashpot lineal ya que la contrafuerza se aplica en una única dirección preestablecida. Este tipo de sistema es popular en cientos de artículos cotidianos que van desde la electrónica que tiene partes móviles externas hasta los amortiguadores instalados dentro de los automóviles, como el salpicadero de un carburador. Los dashpots giratorios funcionan de manera un poco diferente, ya que su movimiento resistivo tiene un patrón circular y, a menudo, se pueden encontrar dentro de la maquinaria que debe girar rápidamente. Un amortiguador de corrientes parásitas es otro ejemplo de un tipo de salpicadero menos popular que funciona con campos magnéticos.
La implementación de dashpots en maquinaria moderna asegura que la precisión se pueda controlar incluso cuando se generen cantidades extremas de fuerza mediante un movimiento rápido. Sin este tipo de tecnología, muchos artículos domésticos e industriales requerirían mantenimiento con mucha más frecuencia, ya que las partes internas colisionarían involuntariamente con mucha más frecuencia. Los dashpots lineales y de válvulas se pueden construir por relativamente poco dinero, pero generalmente brindan un contrapeso efectivo que dura varios años o incluso décadas.