Una toma de corriente también se conoce como receptáculo. Un tomacorriente de receptáculo es un tomacorriente con uno o más receptáculos instalados. La mayoría de las casas modernas tienen tomas de corriente. El más común de ellos es la salida del receptáculo dúplex. Tiene dos salidas idénticas, normalmente apiladas una encima de la otra.
La mayoría de las casas tienen docenas de receptáculos, y la mayoría de ellos están agrupados en salidas de receptáculo. La salida más común utilizada en los Estados Unidos es la de 120 voltios. Esta salida incluye tres agujeros.
Un pequeño orificio rectangular conduce la electricidad a través del enchufe hasta el dispositivo que se está alimentando. Esto se conoce como hendidura caliente. El otro agujero rectangular es neutral. Los dos orificios rectangulares se colocan paralelos entre sí. Debajo de estos, un orificio en forma de arco toma la punta inferior del enchufe, que conecta a tierra el dispositivo.
La salida del receptáculo común está hecha de dos o más de estos receptáculos de 120 voltios. Los receptáculos están empotrados en la pared y conectados al sistema eléctrico del edificio. Luego se cubren con una placa de plástico o metal para que los cables no queden expuestos. Nunca quite la tapa ni inserte nada excepto un enchufe estándar de 120 voltios en un tomacorriente sin antes desconectar la corriente a ese tomacorriente y usar un medidor de corriente para verificar que el tomacorriente no esté activo. Las descargas eléctricas pueden provocar un ataque cardíaco o incluso la muerte.
Se utilizan tomas de corriente especiales en baños, cocinas y otras áreas húmedas para evitar descargas eléctricas. Estos receptáculos especiales se denominan receptáculos interruptores de circuito por falla a tierra (GFCI). Tienen enchufes estándar de tres clavijas. Entre las dos salidas hay dos botones: un botón de reinicio y un botón de prueba. Si el tomacorriente GFCI detecta que la corriente que ingresa no es igual a la corriente que sale del circuito, se apagará, evitando así el flujo de electricidad a cualquier dispositivo enchufado al tomacorriente.
Dado que los tomacorrientes presentan el riesgo de descargas eléctricas e incendios, la Organización Nacional de Protección contra Incendios cubre la instalación y ubicación de tomacorrientes en el Código Eléctrico Nacional (NEC). Aunque el código en sí no es parte de la ley nacional de los Estados Unidos, muchos estados individuales exigen que se cumpla. Antes de instalar o alterar cualquier tomacorriente o sistema eléctrico, el propietario de la casa siempre debe verificar las leyes del código eléctrico de su área. La mejor manera de asegurarse de que todas las reglas se sigan correctamente es contratando a un electricista autorizado.