¿Qué es el fotograbado?

También conocido como fresado fotoquímico, el fotograbado es una técnica de grabado que utiliza estrategias comúnmente asociadas con el procesamiento de imágenes fotográficas. El propósito del fotograbado es ayudar en el proceso de reproducción de imágenes para distribución masiva. Como parte del proceso, se crea una imagen que luego se captura en una placa de metal preparada para tal fin. Luego, esa placa se sumerge en un baño de ácido como un medio para grabar la imagen en la placa. Una vez que se prepara la placa, se puede utilizar para producir múltiples copias de la imagen.

Hay varias variaciones en este proceso básico de fotograbado, y algunas tienen que ver con el tipo de placa de metal utilizada para crear la plantilla en sí. Se pueden utilizar placas de zinc y cobre para el proceso, cada una de las cuales produce una imagen que se configura de formas ligeramente diferentes. Dependiendo de la naturaleza de la imagen involucrada, como una imagen o una ilustración, un método puede ser preferible al otro. En cualquier caso, la propia placa debe estar sensibilizada para que la imagen se capture con claridad.

El proceso de fotograbado implica la aplicación de algún tipo de material que se conoce como fotorresistente. Es este material que se coloca como revestimiento en la placa de metal el que realmente sirve como medio para capturar la imagen y hacer posible el grabado. La exposición a la luz ultravioleta hace que partes del fotorresistente se endurezcan en su posición, correspondiendo con el sombreado en la imagen que se va a capturar. Al sumergir la placa en el baño, las porciones de fotorresistente que no se endurecieron se lavan, dejando atrás la imagen. Para finalizar la parte final del proceso, el metal se expondrá a algún tipo de compuesto de grabado que disuelve las partes de la superficie de la placa de metal que aún no están cubiertas con el fotorresistente, dando como resultado un grabado útil que se puede utilizar para reproducir la imagen en una serie de aplicaciones.

El uso del fotograbado es común en varias industrias, debido a las muchas formas en que este proceso se puede usar para crear grabados que simplifican la creación de múltiples imágenes. Junto con la creación de planchas de impresión que se pueden utilizar en la producción masiva de ilustraciones de medios impresos en libros y otras formas de medios impresos, este proceso también se puede utilizar para crear placas de identificación, grabados en una amplia gama de objetos e incluso ayudar a la creación de trofeos y placas conmemorativas. En las últimas décadas, el fotograbado también ha sido útil en la creación de placas de circuito impreso asociadas con varios dispositivos electrónicos diferentes.