¿Qué es la prueba de Turing?

La prueba de Turing es una prueba hipotética para determinar si la inteligencia de una máquina puede conversar como un humano. La prueba lleva el nombre del genio informático de la Segunda Guerra Mundial, Alan Turing, quien la inventó. Esta prueba es una prueba antropocéntrica, es decir, no prueba la inteligencia en general, sino simplemente la capacidad de conversar como un ser humano. La primera, ahora refutada, implicación fue que la prueba midió la inteligencia objetiva. Sin embargo, podría haber una Inteligencia Artificial que simplemente no habla idiomas humanos ni entiende la conversación humana.

La prueba de Turing tiene tres participantes: dos sujetos y un juez. Uno de los sujetos es una persona y el otro es una computadora. Ambos temas quedan ocultos a la vista del juez. Se comunican con el juez a través de canales de solo texto. El papel del juez es determinar qué canal de texto corresponde al humano y cuál corresponde a la computadora. Si el juez no puede determinar esto, la computadora pasa la prueba.

Todos los años se otorga un premio al chatbot que obtiene mejores resultados en la prueba de Turing. Algunos chatbots, como ELIZA y ALICE, se han vuelto algo famosos, pero ninguno se acerca a imitar con éxito a un humano. La primera instancia formal de la prueba tiene la forma del Premio Loebner, que otorgará 100,000 dólares estadounidenses (USD) a quien presente la IA ganadora. El concurso anual generalmente se lleva a cabo en la ciudad de Nueva York.

Ray Kurzweil, famoso inventor y futurista, y Mitch Kapor, pionero del software, han apostado 10,000 dólares entre sí sobre la cuestión de si una IA pasará la prueba de Turing para 2029. Kurzweil cree que uno lo hará, mientras que Kapor cree que ninguno. Podría decirse que una IA que pasa la prueba de Turing debería ser inteligente en general, es decir, capaz de aprender rápidamente y seguir señales verbales sutiles en una conversación de la misma manera que un humano. Teóricamente, una IA de este tipo también podría reemplazar a los humanos en una serie de trabajos en los que se requieren conversaciones. Una IA que pase la prueba de Turing sería un gran evento y convencería a muchos de que la máquina es verdaderamente inteligente.