La informática blanda es una rama de la informática que funciona sobre la base de que no todas las soluciones a los problemas pueden ser precisas con precisión. Se asocia más comúnmente con técnicas de computación diseñadas para imitar la biología, sobre todo el cerebro humano. La mayoría de los problemas abordados por la computación blanda no se pueden dividir fácilmente en un enfoque puramente matemático.
Para comprender el concepto de computación blanda, es necesario comprender las diferencias entre una computadora y el cerebro humano, particularmente sus fortalezas y ventajas relativas. El cerebro trabaja más lentamente para realizar una tarea específica, pero es mucho más hábil para considerar múltiples opciones al mismo tiempo. Las computadoras pueden calcular más rápidamente, pero están restringidas a un enfoque más lógico, de una cosa y del tiempo.
Para dar ejemplos de estas diferencias en la práctica, un motor de búsqueda puede buscar un fragmento de texto en particular en toda la World Wide Web indexada en una fracción de segundo. Es posible que un ser humano no pueda completar la misma tarea con la cantidad equivalente de material impreso en su vida. Sin embargo, las computadoras son relativamente pobres para reconocer una imagen, por ejemplo, una cara. Por lo general, un humano puede reconocer un rostro conocido en un instante, mientras que incluso reconocer a alguien que conoció hace mucho tiempo es posible en unos pocos segundos.
Se cree que esta disparidad en la capacidad de reconocimiento facial se debe a que los humanos recuerdan bien un rostro como un todo, a diferencia de una computadora, que dividiría una imagen en píxeles individuales y los compararía uno por uno. Mientras tanto, el humano estaría seguro de notar suficientes similitudes para estar seguro de hacer una conjetura fuerte, incluso si hubiera algunas diferencias menores o incluso mayores. Por lo general, un humano puede reconocer el rostro de un viejo amigo de la escuela, incluso si ha cambiado drásticamente con el envejecimiento; el ser humano hace un buen trabajo identificando las características que importan, como los ojos y la estructura ósea.
La informática blanda tiene como objetivo emular el enfoque humano u otro animal para abordar los problemas. Esto puede incluir el uso de lógica difusa, que contrasta con la lógica binaria tradicional en la que cada dato es un 1 o un 0, que se puede considerar en términos de un bien o un mal plano. La lógica difusa permite clasificar un dato en cualquier etapa entre 0 y 1, lo que equivale a tener infinitos grados de precisión.
Los usos más comunes de la computación blanda implican intentar mapear una estructura biológica como el cerebro. Esto permite a los científicos aprender más sobre cómo funciona el cerebro y cómo lidiar con los problemas neurológicos. La computación blanda también se puede utilizar para facilitar el diseño de software que opere a través de una lógica que los humanos puedan entender. También se puede utilizar como base de un enfoque híbrido de la computación, combinando las habilidades de razonamiento de los humanos con la velocidad de procesamiento y la precisión de una computadora.