Los códigos de cifrado, en su nivel más básico, son métodos y herramientas para cifrar varios tipos de datos. Es importante tener en cuenta que los códigos cifrados se diferencian del código más conocido en que el código utiliza una serie predeterminada de palabras o números para transmitir mensajes cortos u órdenes. Por el contrario, los códigos de cifrado transponen o reemplazan las letras y los datos reales con datos determinados por un cierto algoritmo. Por ejemplo, cuando los japoneses lanzaron su ataque a Pearl Harbor en 1941, la frase en clave que usaron para señalar el ataque fue «Escalar el monte Nitaka». Si el comandante japonés hubiera usado códigos cifrados, el mensaje podría haberse parecido a algo parecido a «A1XT3 11-3sD 22XD».
El origen de la palabra cifrado proviene de la palabra latina sifra, así como de la palabra árabe sifr, ambas significan «cero». No se sabe cómo estas palabras llegaron a asociarse con la criptología y los códigos de cifrado en general. Los historiadores han especulado que dado que el concepto de cero era una idea tan extraña y confusa para los europeos medievales, cada vez que se mencionaba en una conversación era similar a ocultar el verdadero significado del mensaje en un concepto confuso. Otras teorías sobre el origen sugieren que debido a que el cero era un número arábigo, los católicos europeos más conservadores lo equiparaban con secretos oscuros.
Los códigos cifrados tienen todo tipo de complejidad. El más simple de ellos estuvo una vez disponible en una caja de cereal. Los anillos decodificadores, populares durante gran parte de las décadas de 1950 y 60, ofrecían un cifrado de transposición simple en el que los anillos se usaban para reemplazar una letra del alfabeto con una letra o un número. Esto permitió a los niños enviar mensajes secretos a sus amigos, quienes también tenían los anillos decodificadores.
En el otro extremo del espectro, sin embargo, está el cifrado de grado militar que utiliza algoritmos creados por computadora para crear cifrados de tal complejidad que a menudo la única forma de descifrarlos es mediante el uso de una clave. Una clave de cifrado contiene el algoritmo utilizado para crear el código de cifrado correspondiente. Cuando se utilizan junto con datos cifrados, la clave descifrará los datos y los hará utilizables una vez más.