El mapeo alfa es un proceso mediante el cual se aplica una textura a un objeto en imágenes generadas por computadora (CGI) tridimensionales (3D) que crean transparencia. El término «opacidad» se usa a menudo en gráficos por computadora, y la opacidad total significa que un objeto es sólido, mientras que la ausencia de opacidad indica un objeto transparente. El mapeo alfa es la creación de un mapa de textura para un objeto que no proporciona color o textura, sino que le indica diferentes niveles de opacidad. El mapa para esto se crea típicamente como un objeto en escala de grises: donde el blanco indica opacidad total, el negro es transparente y los diferentes tonos de gris representan gradientes entre estos dos extremos.
Si bien el mapeo alfa puede parecer complejo, el proceso y la metodología detrás de él son bastante simples. Los objetos en 3D CGI se crean como una serie de formas o polígonos que se conectan entre sí para crear una forma más grande. Una caja cuadrada, por ejemplo, se puede hacer usando solo seis polígonos, con una sola forma de cuatro lados en cada lado para crear una caja. Los objetos más complejos se crean de la misma manera, aunque pueden constar de muchos más polígonos según sea necesario para crear curvas y otros detalles.
Sobre esta forma, que a menudo se llama «malla», se aplican varios «mapas» diferentes para agregar colores, imágenes y texturas. A esa caja simple se le puede aplicar un mapa de textura con la apariencia de tablas de madera, de modo que cada lado parece haber sido ensamblado con madera. A menudo, este es un proceso bastante complicado que involucra varios mapas diferentes que se combinan para hacer que la malla sea lo más realista posible.
El mapeo alfa es simplemente una parte de este proceso más amplio que agrega realismo adicional y se puede usar para agregar detalles de varias maneras. Se pueden utilizar diferentes tipos de imágenes durante el mapeo alfa, aunque la imagen utilizada suele ser un gráfico simple en escala de grises. Esto significa que no contiene ningún color, sino que consta solo de negro, blanco y tonos de gris. La imagen creada de esta manera se conoce como un «mapa alfa».
Una vez que el mapa se aplica a un objeto, las partes que son blancas en el mapa alfa aparecen como normales, mientras que las partes que son negras se vuelven completamente transparentes. Se pueden usar diferentes tonos de gris en el mapeo alfa para indicar diferentes grados de opacidad. Los tonos más cercanos al blanco son más sólidos, mientras que los que se acercan al negro son más transparentes. En realidad, esto no cambia la malla en sí, solo su apariencia.
El mapeo alfa es importante para la creación de gráficos de computadora realistas que no sean demasiado intensivos para la representación o visualización. Si un artista quiere crear un agujero en la caja en el ejemplo anterior, entonces hacerlo requeriría un cambio en el número de polígonos para crear la forma del agujero en uno de los lados. Sin embargo, el uso del mapeo alfa permite al artista crear simplemente un mapa con un área negra para el agujero, que se vuelve transparente en la imagen final.