En derecho, ¿qué es el comentario justo?

El comentario justo es una opinión expresada basada en hechos y hecha en interés público. Es una defensa legal común para demandas por calumnia, calumnia y difamación en los Estados Unidos, Canadá y el Reino Unido. Los tribunales de estos países han apoyado este tipo de expresión como una cuestión de libertad de expresión. Siempre que la opinión expresada se base en hechos, se pueden utilizar comentarios justos para expresar opiniones, por extravagantes que sean. La protección de tales comentarios se originó en el derecho consuetudinario inglés, que son leyes basadas en decisiones de los tribunales y no establecidas por acciones ejecutivas o legislativas.

Para que los comentarios justos se apliquen en los EE. UU., Las opiniones deben emitirse sobre una persona pública, como un político o una celebridad, y expresarse sin malicia, es decir, sin distorsionar deliberadamente los hechos. En Canadá, tales comentarios deben ser opiniones honestas basadas en hechos, opiniones sobre asuntos de interés público y opiniones que otra persona podría tener razonablemente. En el Reino Unido, los tribunales también consideran si otra persona podría sostener razonablemente la opinión expresada y si el acusado cree sinceramente en la opinión expresada.

La ley de comentarios justos distingue la opinión de los hechos. Para que las declaraciones de opinión se incluyan en un comentario justo, los tribunales estadounidenses aplican una prueba de cuatro partes para distinguir opiniones de hechos. Primero, el tribunal pregunta si se puede probar que la declaración es verdadera o falsa. En segundo lugar, comprueba el significado común de las palabras utilizadas. En tercer lugar, pregunta en qué contexto se hizo la declaración. La cuarta parte de la prueba identifica el entorno social en el que se realizó la declaración.

El simple hecho de expresar una opinión no es motivo para una defensa de comentarios justa contra los casos de difamación. Los tribunales a menudo buscan declaraciones fácticas para respaldar las opiniones afirmadas al decidir si se aplican estas leyes. Por ejemplo, «En mi opinión, el alcalde tomó drogas» no proporciona una base fáctica para la opinión expresada y probablemente no estaría bajo protección. “Vi al alcalde inhalar un polvo blanco a través de una pajita en la trastienda. En mi opinión, el alcalde tomó drogas ”, sin embargo, proporciona una base fáctica para la opinión, siempre que el orador haya presenciado tal evento y no distorsione deliberadamente lo que vio. La inclusión de hechos permite que otra persona juzgue el valor de la opinión.

Los periodistas con frecuencia confían en comentarios justos para protegerse contra casos de calumnia, calumnia y difamación. Por ejemplo, una crítica teatral dura, sin importar cuán desfavorable sea, está protegida bajo un comentario justo si el crítico experimentó la interpretación escrita y basó opiniones en la revisión sobre esa experiencia. Del mismo modo, un periodista puede criticar severamente a un político y pintarlo de mala manera, siempre que las opiniones se basen en hechos, como las acciones del político.