El tejido cicatricial interno es tejido cicatricial que se forma dentro del cuerpo. También puede escuchar el tejido cicatricial interno denominado adherencias internas o simplemente adherencias. Dependiendo de dónde se forme una cicatriz, es posible que no presente problemas médicos o que provoque problemas de salud graves. Para adherencias severas, los pacientes pueden requerir cirugía.
Las cicatrices son la respuesta del cuerpo a las lesiones. Cuando el cuerpo se lesiona, intenta reparar el sitio lesionado lo más rápido posible. Con una lesión leve, el cuerpo puede restaurar el tejido a su estado anterior. Más comúnmente, el tejido se reemplaza con una barrera inferior de tejido cicatricial que no puede reemplazar completamente el tejido faltante. Las cicatrices a menudo reciben poca sangre, por lo que parecen más pálidas que el tejido circundante.
Dentro del cuerpo, se forma tejido cicatricial interno como resultado de un trauma. La cirugía es una causa común de adherencias y también puede ser el resultado de ataques cardíacos, que causan cicatrices en el músculo cardíaco, junto con lesiones graves como músculos y ligamentos desgarrados. La enfermedad inflamatoria también puede causar tejido cicatricial interno. En algunos casos, el tejido cicatricial interno pasa desapercibido para su propietario, lo que ilustra la capacidad del cuerpo para repararse a sí mismo de manera bastante ordenada cuando goza de buena salud.
En otros casos, sin embargo, el tejido cicatricial interno forma una adhesión. Una adhesión es un vínculo entre dos cosas que no estaban unidas previamente. Por ejemplo, una adhesión podría hacer que un órgano se adhiera a la pared de la cavidad abdominal o podría provocar una obstrucción del intestino. Las adherencias suelen ser bastante dolorosas porque restringen la libertad de movimiento del órgano u órganos afectados. Las adherencias causadas por la enfermedad inflamatoria pélvica, por ejemplo, pueden causar torsión de los órganos reproductivos, lo que resulta en dolor severo y problemas de fertilidad.
Las técnicas quirúrgicas han avanzado hasta el punto en que las adherencias son relativamente raras, gracias a herramientas como las barreras de adherencia. Sin embargo, el tejido cicatricial interno aún puede ser causado por cosas como accidentes deportivos y enfermedades como el síndrome del intestino irritable. Es más probable que las afecciones crónicas causen tejido cicatricial interno y adherencias, y es una buena idea hablar con un médico sobre cómo controlar estas afecciones y hablar sobre posibles tratamientos para las cicatrices internas resultantes, que van desde inyecciones de esteroides hasta cirugía.
Los médicos pueden verificar las adherencias con herramientas como las máquinas de ultrasonido. Dependiendo del grosor de una adhesión, puede aparecer fácilmente en un ultrasonido o puede presentarse como una forma turbia. Una vez que un médico ha confirmado que existen adherencias y ha medido su gravedad, se pueden considerar las opciones de tratamiento.