Las responsabilidades de un agente de fraude generalmente implican la investigación de casos o instancias en las cuales una empresa u organización sospecha que una acción fraudulenta pudo haber tenido lugar. Este tipo de agente a menudo trabaja para una institución financiera, como un banco, compañía de seguros o prestamista, y revisa o investiga diferentes informes. Esto a menudo comienza con una descripción general del papeleo presentado y de las reclamaciones, pero puede requerir investigación e investigación en el campo para observar a las personas o realizar entrevistas. Luego, un agente de fraude generalmente concluye un caso haciendo un informe final que se presenta ante su empleador e indica las acciones sugeridas.
Una de las primeras acciones que toma un agente de fraude, a veces llamado investigador u oficial, es obtener y revisar casos que pueden ser de naturaleza fraudulenta. Por ejemplo, si una compañía de seguros recibe un reclamo de un cliente, entonces pueden enviar la documentación al agente. Luego, el agente analiza estos datos para determinar su legitimidad inicial, lo que puede implicar verificar dos veces la información básica provista en el reclamo y asegurarse de que se complete correctamente. En esta primera etapa, un agente de fraude puede aprobar el papeleo y pasarlo, o decidir que se requiere más investigación.
Como otro ejemplo, un agente de fraude que trabaja para una compañía de seguros podría decidir que un reclamo parece ser sospechoso y entrevistar a la persona que lo presentó. La investigación adicional puede incluir hablar con profesionales médicos o legales involucrados con la persona que realiza el reclamo y garantizar que la información proporcionada por el reclamante sea legítima y precisa. Un agente de fraude en un banco u organización de préstamos de dinero puede verificar las referencias proporcionadas en la documentación y realizar una verificación de antecedentes de alguien. La naturaleza exacta de la investigación realizada durante una investigación puede variar según la naturaleza de un caso, pero generalmente se hace para determinar la legitimidad de un reclamo.
Una vez que un agente de fraude ha establecido si el papeleo es exacto, él o ella pueden proporcionar más instrucciones a su empleador. Si la investigación no revela nada sospechoso, entonces el oficial puede recomendar que se apruebe un reclamo o préstamo. Cuando la investigación o las verificaciones de antecedentes indican que puede haber actividad fraudulenta, es probable que el agente indique a su empleador que rechace el reclamo. A menudo hay ramificaciones legales que pueden ocurrir cuando se encuentra este tipo de fraude o abuso, por lo que un agente de fraude puede necesitar contactar a los profesionales de la ley y proporcionarles la información que ha reunido.