Un guardián de peces es un oficial de la ley que vigila los lagos públicos, ríos y reservas de vida silvestre. Él o ella hace cumplir principalmente varias leyes de navegación, pesca y protección del medio ambiente. También se le puede exigir a un profesional que realice las mismas tareas que otros agentes de policía cuando se encuentra con actividades peligrosas o criminales. Algunos guardabosques registran información sobre poblaciones de peces, vegetación y otras especies marinas, monitorean la calidad del agua y el aire y brindan recursos educativos al público sobre sostenibilidad y seguridad.
En los Estados Unidos, las agencias locales, estatales y federales emplean guardabosques para patrullar las aguas públicas. Un guardián de peces generalmente hace rondas de rutina alrededor de un lago o río, vigilando la actividad ilícita. Él o ella pueden detener a los pescadores y navegantes recreativos para asegurarse de que tengan licencias válidas y que cumplan con las normas de seguridad. Un director puede inspeccionar un bote o un remolque para asegurarse de que todas las luces funcionen correctamente y que los chalecos salvavidas estén a bordo. Muchos guardias brindan información útil a los pescadores y navegantes, informándoles sobre las regulaciones locales y los mejores lugares para disfrutar de sus actividades.
Cuando un director de pescado descubre actividad ilegal, está autorizado a escribir citas y detener a sospechosos, si es necesario. Él o ella podría ayudar a otros oficiales con investigaciones, participar en misiones de búsqueda y rescate, o comparecer ante el tribunal para testificar a favor o en contra de los sospechosos. Un director de pescado generalmente mantiene registros detallados de sus patrullas, toma notas sobre posibles actividades delictivas y vigila de cerca a las personas sospechosas.
La protección del medio ambiente es una preocupación importante de la mayoría de los guardianes de peces. Muchos profesionales monitorean la vida silvestre, observando cambios en el comportamiento, patrones de migración o números de población. Un alcaide puede investigar la calidad del agua y el aire, y reportar la contaminación u otros hallazgos anormales a las autoridades correspondientes. Él o ella también podría proporcionar recursos a los pescadores y navegantes sobre la importancia de proteger la vida silvestre y mantener limpias las fuentes de agua.
Para convertirse en un guardián de pescado, y generalmente se requiere que el individuo tenga aproximadamente dos años de experiencia universitaria, aunque algunas agencias requieren nuevos guardias para tener títulos de licenciatura en aplicación de la ley o gestión ambiental. Además, un posible director de pesca debe completar el entrenamiento en una academia acreditada para obtener la licencia. La capacitación puede durar entre cuatro meses y un año, según el programa. Una vez que se cumplen los requisitos educativos y de capacitación, un nuevo director generalmente recibe instrucción en el trabajo de un profesional experimentado para conocer detalles sobre un área específica.