Las caspasas son una familia de proenzimas inactivas que juegan un papel crucial en la apoptosis celular, que es la muerte programada de las células. El papel de la caspasa 3 en la apoptosis es escindir y activar las caspasas 6, 7 y 9 para descomponer las células apoptóticas antes de la extracción. Después de este proceso, la proteína caspasa 3 se escinde y descompone por sí misma por la caspasa 8 y 10, así como por cualquier proteína caspasa 9 inactiva que aún no se haya escindido. La división secuencial y la activación de estas proteínas es crucial para la etapa de ejecución de la muerte celular preprogramada.
El papel de la caspasa 3 en la apoptosis es activar las etapas de la muerte celular de manera no traumática. A diferencia de la necrosis, que es la destrucción traumática de las células, la apoptosis es el proceso mediante el cual las células se descomponen y destruyen de manera programada y controlada para permitir diversos crecimientos y desarrollos en un organismo. El proceso de apoptosis es la razón por la cual los dedos de las manos y los pies se dividen en la etapa embrionaria del desarrollo del organismo. La muerte celular controlada permite que los dígitos se separen sin trauma. Caspase 3 es vital para este proceso porque permite que el proceso progrese en secuencia, sin eventos sorpresa que de lo contrario causarían daños indebidos a las células restantes.
Cuando el proceso está en marcha, el propósito de la caspasa 3 en la apoptosis es escindir las proteínas celulares clave. Esto se logra mediante un efecto en cascada, que comienza cuando un receptor de muerte basado en la superficie celular transmite las señales apoptóticas a las proteínas caspasa precedentes, activándolas. Estas proteínas de caspasa activan las siguientes proteínas en la secuencia, lo que finalmente conduce a la caspasa efectora, como la caspasa 3. Estas caspasas son directamente responsables de la escisión de las proteínas celulares, como las proteínas del citoesqueleto, que conducen a los cambios morfológicos, incluida la división de dígitos, que se observa en las células que sufren apoptosis.
Se cree que el papel de la caspasa 3 en la apoptosis podría, cuando se comprende mejor, conducir a una mejor comprensión de enfermedades como la enfermedad de Alzheimer. A medida que la proteína caspasa 3 escinde las células, a veces puede causar daños en áreas del cuerpo. La investigación indica que esto podría ser una causa de trastornos mentales. Se cree que una mayor comprensión de los mecanismos de la caspasa 3 en la apoptosis revelará cómo ocurre este proceso y podría conducir al tratamiento.