Mucha gente cree que consumir grasas es malo para usted. Si bien esto es parcialmente cierto, no es completamente exacto. Algunas grasas, como la manteca de cerdo y algunas margarinas, son grasas saturadas, que pueden ser perjudiciales para su salud. Otras grasas, como las grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas, en realidad pueden ser buenas para usted. Las grasas poliinsaturadas son aquellas que tienen menos hidrógeno en su estructura química que las grasas saturadas.
La estructura química de un ácido graso está compuesta de hidrógeno y carbono. Un ácido graso saturado tiene enlaces simples entre sus átomos de carbono y transporta la cantidad máxima de hidrógeno que pueden contener. Una grasa poliinsaturada tiene dobles enlaces entre algunos de sus átomos de carbono, lo que significa que hay menos átomos de hidrógeno que la de una grasa saturada. Es esta característica química la que le da a una grasa poliinsaturada su punto de fusión relativamente bajo. La estructura química también significa que estas grasas tienden a ponerse rancias fácilmente.
Las grasas poliinsaturadas se pueden encontrar naturalmente en muchos productos. Los aceites vegetales y el pescado son dos de esas fuentes. El pescado graso, como el salmón, está lleno de una grasa poliinsaturada particularmente importante conocida como ácido graso Omega 3. Aunque es esencial para el cuerpo, esta grasa no es producida por el cuerpo. En cambio, debe obtenerse de fuentes externas.
Los científicos recomiendan comer grasas poliinsaturadas porque pueden ayudar a la salud de una persona. Estas grasas pueden aumentar el colesterol bueno mientras disminuyen el colesterol malo. En otras palabras, las grasas poliinsaturadas pueden ayudar a reducir el riesgo de enfermedad cardiovascular. Muchas personas ahora cocinan con aceite vegetal en lugar de una grasa saturada, como la manteca de cerdo.
Sin embargo, no todas las grasas no saturadas son buenas para usted. Las grasas insaturadas generalmente permanecen líquidas e inestables a temperatura ambiente, pero hay un proceso que puede hacerlo más estable: la hidrogenación. Este es el proceso utilizado para hacer margarina. Una grasa parcialmente hidrogenada, a veces llamada grasa trans, es una grasa no saturada a la que se le ha agregado hidrógeno para que sea más estable. Estos tipos de grasas tienden a permanecer sólidas a temperatura ambiente, al igual que las grasas saturadas.
Las grasas trans han demostrado ser perjudiciales para la salud de una persona. Estas grasas pueden causar una disminución del colesterol bueno y un aumento del colesterol malo. Este proceso puede conducir a problemas de salud, como enfermedades cardiovasculares. Por esta razón, algunos países, incluido Dinamarca, se han movido para prohibir las grasas trans. En otros países, incluido Estados Unidos, las grasas trans se están eliminando gradualmente de muchas cadenas de comida rápida, aunque muchos estados no lo requieren.