La deficiencia de ácido fólico es una condición médica que ocurre cuando las personas no consumen suficiente ácido fólico o no pueden absorber este nutriente esencial. Si la deficiencia persiste, puede provocar anemia. Las deficiencias de ácido fólico están relacionadas con una serie de problemas de salud, y por esta razón, muchas naciones exigen la suplementación con ácido fólico de alimentos como los cereales. La suplementación ha reducido radicalmente la incidencia de deficiencia en muchas regiones del mundo.
El ácido fólico, también conocido como folato o vitamina B9, se puede encontrar en muchos alimentos, incluidas las frutas, verduras y carnes. En el cuerpo, ayuda con la producción de nuevas células sanguíneas, y también juega un papel en la replicación de ARN y ADN. Una de las consecuencias inmediatas de una deficiencia de ácido fólico es una disminución en la producción de glóbulos rojos, que conduce a la anemia. La falta de nutrientes también puede contribuir al desarrollo de algunos tipos de cáncer y aumentar el riesgo de arteriosclerosis. En mujeres embarazadas, una deficiencia de ácido fólico puede provocar defectos de nacimiento.
Se puede diagnosticar una deficiencia de ácido fólico extrayendo sangre. Si un paciente es deficiente, el médico realizará una entrevista para recopilar información sobre el historial del paciente. Si el paciente tiene una dieta inadecuada o bebe mucho alcohol, puede ser posible corregir el problema con los suplementos de ácido fólico y un cambio en la dieta. En los casos en que el paciente parece estar comiendo bien, puede ser necesario realizar pruebas para ver si el cuerpo tiene dificultades para absorber el ácido fólico.
La mayoría de las personas obtienen el ácido fólico que necesitan del consumo diario de frutas y verduras. Debido a que el ácido fólico es soluble en agua, el cuerpo lo expresa regularmente, lo que hace que sea crítico absorberlo todos los días. Aunque el cuerpo mantiene pequeñas cantidades en reserva, estas reservas pueden agotarse rápidamente. A menudo se alienta a las mujeres embarazadas a tomar suplementos de ácido fólico para asegurarse de que sus fetos reciban suficiente ácido fólico para desarrollarse normalmente.
Los pacientes con deficiencia de ácido fólico pueden experimentar síntomas como fatiga, dificultad para concentrarse y dolores de cabeza. Es difícil una sobredosis de ácido fólico, porque el cuerpo expresa un exceso de ácido fólico cuando no puede usarlo. Sin embargo, tomar mucho ácido fólico a veces puede ocultar los signos de una deficiencia de vitamina B12, otra vitamina esencial. Las deficiencias de B12 pueden causar daño cerebral, haciéndolos críticos para identificar y corregir. El exceso de ácido fólico también puede afectar el tratamiento de la malaria.