La planificación generalmente se considera un elemento crucial de los negocios, y esto se aplica particularmente a las finanzas de una empresa. Por lo tanto, muchos dueños de negocios no esperan hasta que el próximo año financiero haya comenzado a organizar el futuro. En cambio, a menudo consideran el posible presupuesto para el próximo año, generalmente con la ayuda de un estado de resultados pro forma. Esto generalmente se considera una herramienta de planificación invaluable, y a menudo se solicita como parte de un plan de negocios integral.
La mayoría de los estados de resultados analizan lo que ya sucedió, mientras que un estado de resultados proforma mira hacia el futuro. Sin embargo, este tipo de afirmación considera el pasado cuando se forma. Por lo general, los dueños de negocios observan el desempeño del año anterior y lo comparan con el período de tiempo actual para ayudar a determinar lo que el año siguiente podría tener en la tienda financieramente. Realizar una investigación de lo que los expertos predicen para la industria relevante en el próximo año también es útil para desarrollar este tipo de declaración.
Para crear este tipo de documento, los dueños de negocios pueden desarrollar primero un balance general pro forma. El primer paso debe ser asumir la cantidad de flujo de efectivo proyectado, pasivos y activos. Este tipo de declaración está llena de conjeturas educadas por definición, por lo que se esperan estimaciones. Estos se pueden comparar con los datos reales del año actual. Se alienta a los propietarios a pensar en cómo cambiarían los ingresos del año en curso el año siguiente, por ejemplo, debido a los cambios en la oferta y la demanda.
Se puede desarrollar un estado de resultados profesional pro forma una vez que se haya reunido la información necesaria. Las categorías deben incluir los ingresos por ventas proyectados y el costo de cada producto o servicio vendido. Otras categorías cruciales incluyen los gastos anticipados, la depreciación de los equipos y los impuestos. Muchos de estos tienden a permanecer iguales cada año, por lo que esto puede ser fácil.
Echar un vistazo a las condiciones actuales y proyectadas del mercado debería ofrecer alguna orientación sobre los ingresos y gastos anticipados. Al final de las estimaciones, los ingresos se deben sumar, con los gastos restados al final. Los datos pueden compararse con años anteriores para decidir si contratar más ayuda o reducir personal, entre otros posibles ajustes.
Los propietarios pueden optar por crear un estado de resultados pro forma anualmente, pero algunos expertos sugieren uno nuevo cada trimestre para que sea lo más preciso posible. Muchos propietarios pueden experimentar algunas dificultades durante el proceso. Por lo tanto, un contador o profesional similar puede ser consultado para desarrollar este documento en muchos casos.
Inteligente de activos.