Existen varios tipos de cuentas bancarias comerciales, algunas de las cuales tienen fines relacionados pero tienen diferentes condiciones asociadas. Un ejemplo de dicha cuenta es la conocida cuenta de ahorros, que tiene el mismo propósito que sugiere su nombre. La cuenta corriente es otra inclusión familiar en las cuentas bancarias comerciales, que es fundamentalmente diferente de una cuenta de ahorros. Otros tipos de cuentas bancarias comerciales incluyen cuentas del mercado monetario y certificados de depósito.
Cuando se enumeran los tipos de cuentas de bancos comerciales, la cuenta de ahorros es uno de los tipos de cuenta que viene a la mente. Este tipo de cuenta generalmente se crea para clientes bancarios que desean ahorrar algo de dinero y también evitar que su dinero esté inactivo. El dinero inactivo es un término que se utiliza para describir cualquier tipo de dinero que no hace más que quedarse donde se haya colocado, a todos los efectos y propósitos, dicho dinero no aumenta su valor. Al colocar su dinero en una cuenta de ahorro, las personas pueden al menos asegurarse de que el dinero gane algún tipo de interés, con la tasa exacta determinada por el banco en cuestión y otras políticas monetarias y fiscales. Algunos bancos también pueden tener políticas que obligan a sus clientes a mantener un cierto límite en sus cuentas de ahorro a riesgo de incurrir en algún tipo de penalización monetaria.
Las cuentas corrientes son otros tipos de cuentas bancarias comerciales que permiten a los titulares de cuentas tener un acceso más inmediato a su dinero. Esto se debe al hecho de que las cuentas corrientes generalmente están reservadas para gastos, incluidos los actos de emisión de cheques. Las cuentas corrientes básicas no ofrecen ningún interés por los depósitos, mientras que las cuentas corrientes que generan intereses ofrecen a los depositantes algún tipo de interés, y la tasa exacta depende de varios factores. Una cuenta corriente común a menudo tiene un número máximo de cheques que los propietarios de dichas cuentas pueden emitir. Por otro lado, las cuentas corrientes con intereses no tienen tales restricciones.
Los depósitos en el mercado monetario son una categoría diferente de cuentas bancarias comerciales que convierten el saldo del depositante en elementos como letras del tesoro y papel comercial. Dichas cuentas no comienzan a generar intereses hasta que se alcanza un cierto saldo. Los certificados de depósito se refieren a los tipos de cuentas bancarias comerciales que implican algún tipo de acuerdo o arreglo con el banco para dejar el dinero en una cuenta durante un período de tiempo acordado. Cuanto más tiempo permanezca el dinero, mayores serán los intereses.
Inteligente de activos.