La amaurosis fugaz es una breve pérdida de visión en un ojo. A veces se la conoce como ceguera monocular temporal. La pérdida fugaz de la visión puede ser desconcertante y también puede ser una señal de que algo puede estar muy mal, por lo que es importante buscar atención médica incluso después de que la pérdida de la visión se resuelva por sí sola. En algunos casos, la ceguera temporal puede ser un indicador de una emergencia médica grave. Una vez que se identifica la causa, se puede tratar para prevenir problemas adicionales en el futuro.
Varios problemas pueden provocar amaurosis fugaz. Uno es una interrupción temporal del suministro de sangre al ojo. Otro es un accidente cerebrovascular u otro tipo de evento neurológico que interrumpe las señales enviadas desde el ojo al cerebro. Ciertas afecciones oculares, como el glaucoma, también pueden causar amaurosis fugaz, al igual que la exposición a la fuerza centrífuga, por lo que la visión de un ojo a veces parece oscurecida o borrosa después de algunos tipos de atracciones de carnaval.
Algunas personas describen la experiencia como si alguien hubiera bajado una persiana o una cortina sobre un ojo. En otros casos, el ojo simplemente se desmaya o alguien experimenta una visión borrosa, borrosa u oscurecida. Un ataque de amaurosis fugaz puede durar desde unos segundos hasta varias horas, según la causa. En algunos casos, la pérdida de la visión puede volverse permanente si no se aborda.
Cuando alguien se presenta con amaurosis fugaz o le informa a un médico que recientemente experimentó una pérdida fugaz de la visión, un oftalmólogo puede examinar el ojo y realizar algunos estudios de imágenes médicas para verificar el suministro de sangre al ojo y otros problemas obvios que puede estar involucrado en la pérdida de visión. El paciente también puede ser derivado para una evaluación neurológica para ver si el problema es de origen neurológico. Estos exámenes se utilizan para explorar posibles causas, con la esperanza de identificar la razón por la que el paciente experimentó pérdida de visión.
Una vez que se ha identificado la causa, las opciones de tratamiento pueden estar disponibles. Si, por ejemplo, la amaurosis fugaz es causada por un accidente cerebrovascular, el accidente cerebrovascular debe tratarse de inmediato para evitar daños en el cerebro. Un bloqueo en el suministro de sangre al ojo, por otro lado, puede requerir cirugía para abordar el bloqueo o instalar un stent para que los bloqueos no vuelvan a ocurrir. Si la amaurosis fugaz es causada por una afección crónica como el glaucoma, puede ser una señal de que se necesita un mejor manejo o un tratamiento más agresivo.