La endoscopia rígida es un procedimiento médico en el que un profesional médico inserta un tubo telescópico rígido en un paciente para obtener una vista de un órgano o área de interés, utilizando una cámara en el tubo para ver la anatomía interna del paciente. El dispositivo, conocido como endoscopio, también tiene un canal de instrumentos para que el médico pueda pasar instrumentos a través del tubo para realizar procedimientos como biopsias. Por lo general, esto se lleva a cabo en el consultorio de un médico o en una clínica, con anestesia adecuada para mantener al paciente cómodo durante el procedimiento.
La alternativa es la endoscopia flexible, donde el médico usa un tubo flexible en lugar de rígido. La mejor opción depende del procedimiento, la experiencia del médico y las preferencias del centro. En la endoscopia rígida, los pacientes pueden experimentar más dolor e incomodidad porque el tubo no se flexiona con el cuerpo durante el procedimiento. Sin embargo, es posible que el médico pueda obtener una mejor vista o realizar tareas que no son posibles con un endoscopio flexible.
La endoscopia permite a los profesionales médicos mirar directamente dentro del cuerpo. Puede ser útil para fines de diagnóstico en los que los médicos desean una imagen o muestras visuales, ya que es menos invasiva que la cirugía con fines exploratorios y de diagnóstico. También es útil para procedimientos quirúrgicos como la llamada cirugía de ojo de cerradura, donde el cirujano hace algunas pequeñas incisiones para insertar un endoscopio y otras herramientas con el fin de acceder a un sitio quirúrgico sin hacer una gran incisión abierta. Algunos procedimientos en los que la endoscopia rígida puede ser una opción pueden incluir cirugía en las articulaciones, evaluación de problemas con el tracto urinario y cirugía abdominal.
Para algunos procedimientos, el paciente debe estar bajo anestesia general por seguridad. El médico necesita que el paciente esté inconsciente y quieto para realizar la cirugía, y la anestesia también minimizará la experiencia del dolor. En otras endoscopias, el paciente puede permanecer despierto durante el procedimiento, aunque generalmente recibirá algún tratamiento para el dolor y sedantes para su comodidad. Los pacientes pueden discutir sus opciones con sus médicos para determinar la mejor opción para un procedimiento determinado.
El tiempo de recuperación después de una endoscopia rígida puede variar. A veces, los pacientes pueden volver a los niveles normales de actividad inmediatamente después del procedimiento, mientras que otros pacientes pueden necesitar descansar y trabajar en el manejo del dolor. Los profesionales médicos generalmente recomiendan levantarse y moverse para reducir el riesgo de coágulos y otras complicaciones, incluso si los pacientes no pueden moverse mucho inmediatamente después de la endoscopia. Incluso una actividad ligera, como caminar por la habitación con la ayuda de una enfermera, puede reducir las complicaciones quirúrgicas.