¿Cuáles son las causas más comunes de entumecimiento de los muslos?

Las dos causas más comunes de entumecimiento persistente del muslo son la ciática, que es una compresión o «pellizco» de uno de los nervios centrales de la pierna, y la trombosis venosa profunda, una afección médica caracterizada por coágulos de sangre que se forman en las piernas pero que pueden romperse. liberarse y moverse al corazón o al cerebro. Ambos son bastante graves y, en el caso de la trombosis venosa profunda, pueden ser fatales. Sin embargo, el entumecimiento no siempre es una preocupación importante. También puede ser causado por una lesión o distensión muscular. En estos casos, la pérdida de sensación suele ser más fugaz y suele ser relativamente menor. Aún así, puede ser incómodo y, por lo general, se aconseja a las personas que al menos se hagan un chequeo superficial para asegurarse de que no haya un problema o lesión mayor que deba tratarse.

Ciática

La compresión aguda de la raíz nerviosa, también conocida como ciática, es una de las causas más comunes de entumecimiento del muslo. La ciática puede afectar a cualquier persona, pero es más común en personas que están envejeciendo, que están embarazadas o que han aumentado de peso recientemente. El entumecimiento relacionado con este tipo de compresión nerviosa generalmente comienza en la zona lumbar y se irradia a las nalgas, los muslos y las pantorrillas. Algunas personas sienten entumecimiento solo en los muslos, pero puede cambiar de posición o cambiar de posición de un día a otro.

Se alienta a los pacientes que padecen esta afección a minimizar el ejercicio cardiovascular para evitar posibles complicaciones o agravamiento. Evitar sentarse o acostarse en la misma posición durante un período prolongado de tiempo a veces también puede disminuir los síntomas. El masaje ligero de la espalda y las piernas suele ser la forma más eficaz de alivio inmediato, especialmente cuando los síntomas son relativamente leves. En casos más graves, es posible que se requiera cirugía.

Trombosis Venosa Profunda

La trombosis venosa profunda es otra causa común de entumecimiento de los muslos. Esta afección ocurre cuando se desarrolla un coágulo de sangre en la parte inferior de la pierna. En general, cuanto más grande es el coágulo, más preocupantes son los síntomas; los coágulos grandes pueden impedir el flujo sanguíneo y pueden provocar una acumulación de células sanguíneas y otros nutrientes importantes. El entumecimiento es más probable en casos extremos, pero puede ocurrir en respuesta incluso a bloqueos menores.

Hay un par de cosas diferentes que pueden causar esta afección, pero los períodos prolongados de inactividad suelen ser los que se citan con más frecuencia. Las personas que viajan en vuelos largos a menudo corren un riesgo especial porque los cambios de altitud y la presión pueden hacer que los coágulos se liberen, lo que a veces conduce a una muerte casi inmediata o daño cerebral. El entumecimiento es una de las señales de advertencia que puede indicar una situación realmente mala.

En la mayoría de los casos, la trombosis venosa profunda se trata mediante el uso de varios medicamentos y procedimientos recetados, pero el ejercicio cardiovascular ligero, como caminar o andar en bicicleta, también puede proporcionar resultados efectivos. Es posible que los pacientes que no vean mejoras después de usar estos métodos deban someterse a una cirugía. En general, cualquier persona diagnosticada con trombosis venosa profunda debe ser monitoreada de cerca por un médico, ya que la afección puede ser indicativa de formas más graves de enfermedad cardiovascular.
Lesión muscular
Con frecuencia, el entumecimiento también es causado por lesiones o traumas. Las personas que han sufrido accidentes en las piernas pueden experimentar esto, al igual que los atletas que no se estiran correctamente o que trabajan ciertos músculos de las piernas con demasiada fuerza. Las lesiones de los isquiotibiales son algunas de las más comunes y pueden incluir un tirón, desgarro o distensión muscular, así como tendinitis u otras lesiones por uso excesivo.

A las personas que desarrollan estas afecciones a menudo se les anima a descansar, estabilizar y aplicar hielo en la parte del cuerpo afectada. En casos más graves, es posible que se requiera cirugía. La recuperación completa de este tipo de lesión puede llevar varias semanas o incluso meses. En la mayoría de los casos, el período de recuperación depende de la gravedad de la afección.
Cuándo buscar ayuda
A los pacientes que experimentan entumecimiento continuo a menudo se les anima a buscar asistencia médica lo antes posible. El no hacerlo puede resultar en dolor crónico que puede no ser tratable con medicamentos o procedimientos tradicionales. El tratamiento para el entumecimiento de los muslos suele estar estrechamente relacionado con la edad y el nivel de actividad física del paciente, así como con la gravedad de la afección.