El hueso ganchoso es uno de los huesos que se encuentran en la mano, y el término utilizado para una fractura en este hueso es una fractura ganchosa. Si bien este tipo de fractura le puede pasar a cualquiera, se observa con mayor frecuencia entre quienes participan en deportes que requieren el uso de un bate, un palo o una raqueta. Aquellos con antecedentes de caídas con las manos extendidas también pueden ser particularmente vulnerables a desarrollar una fractura de ganchosos. El tratamiento de este tipo de fractura a menudo requiere una intervención quirúrgica para reparar el daño en el hueso y los tejidos circundantes. Cualquier pregunta o inquietud sobre una fractura de ganchoso o las opciones de tratamiento más adecuadas en una situación individual debe discutirse con un médico u otro profesional médico.
El hueso en forma de cuña conocido como ganchoso contiene una proyección en forma de gancho que es particularmente vulnerable a las lesiones entre quienes participan en deportes que involucran un movimiento de balanceo de la mano. De hecho, es esta proyección la que se ve más afectada por una fractura de ganchosos. Este tipo de fractura se pasa por alto fácilmente en una radiografía estándar, por lo que con frecuencia se necesitan pruebas de diagnóstico adicionales, como una tomografía computarizada o una resonancia magnética, para obtener un diagnóstico preciso.
Es posible que una fractura leve de ganchosos no requiera ningún tipo de tratamiento médico invasivo. En estos casos, descansar la mano afectada y aplicar hielo en el área pueden ser opciones de tratamiento suficientes mientras el cuerpo trabaja para curar naturalmente la fractura. Es posible que se necesiten medicamentos de venta libre o recetados, según la gravedad del malestar. La fisioterapia puede ser útil para asegurarse de que los músculos de la mano hagan suficiente ejercicio suave para mantenerse saludables durante el proceso de curación. Las órdenes del médico deben seguirse con precisión para evitar lesiones adicionales.
En la mayoría de los casos, la fractura del ganchoso requerirá una intervención quirúrgica. Esto es especialmente cierto si los nervios o los vasos sanguíneos se comprimen, lo que provoca problemas de circulación o de movimiento. Dependiendo de la gravedad de la fractura, es posible que deba extirparse por completo una parte del hueso ganchoso. Después de la reparación del hueso y de cualquier tejido circundante que haya sido dañado, la mano afectada a menudo se coloca en un yeso durante varias semanas para que la mano permanezca inmóvil y no se produzcan más daños. Los posibles efectos secundarios de la cirugía de fractura de ganchosos incluyen una disminución permanente del agarre y daño temporal o permanente a los nervios de la mano.