En una fractura compuesta, que también se puede llamar fractura abierta, el hueso roto atraviesa la piel. Puede ser completamente visible o el hueso perforador puede haberse retirado, dejando una herida abierta al hueso. Estas fracturas tienden a presentar un gran riesgo por varias razones y, por lo general, necesitan un tratamiento quirúrgico bastante inmediato para una mejor curación.
La razón más convincente para obtener ayuda médica para una persona con una fractura compuesta es evitar una infección. Cualquier corte en la piel deja vulnerable el área herida y es posible que las bacterias ingresen a la herida. Dependiendo del tipo de fractura, incluso es posible que una infección bacteriana afecte el hueso, lo que puede crear un desafío significativo para la curación. Para evitar esto, los médicos generalmente desean reparar el hueso y cerrar la herida lo más rápido posible, mientras quizás administran antibióticos para asegurarse de que no se desarrolle ninguna infección. Retrasar esto aumenta el riesgo de infección y puede convertir la reparación de un proceso simple a uno complejo.
Lo único que se debe hacer mientras se lleva a una persona al médico o se espera la asistencia de emergencia es cubrir cualquier herida con una gasa esterilizada. Si es posible trabajar alrededor de un hueso que sobresale y el sangrado es abundante, se puede aplicar una ligera presión a los apósitos estériles. Esto no siempre es posible porque una protuberancia ósea significativa significaría aplicar presión en el área de la fractura, lo que podría dañarla aún más. En general, las personas deben mantener a la persona lesionada lo más quieta posible. No se recomienda aplicar un torniquete para detener el sangrado si hay ayuda de emergencia cerca.
La reparación de la fractura compuesta generalmente implica cirugía. El tipo de cirugía y la extensión de la reparación dependen del grado total de lesión. La duración de la curación depende de la gravedad de la lesión, pero normalmente es de al menos dos meses o más. Es posible que los cirujanos necesiten colocar tornillos o placas para estabilizar un hueso, lo que podría requerir una cirugía posterior para extraerlo.
La gravedad de la fractura abierta no significa que las fracturas simples, en las que no se perfora la piel, tampoco sean complejas. Al menos con una fractura compuesta, es fácil adivinar que la lesión necesita tratamiento de inmediato. Con fracturas simples, los huesos aún pueden moverse y romper el tejido interno y cosas como los ligamentos pueden romperse. Esto sugiere que las personas tampoco se demoren en recibir tratamiento para las fracturas cerradas.