¿Qué es una prueba de hemoglobina?

Una prueba de hemoglobina es un análisis de sangre que se usa para determinar cuánta hemoglobina tiene un paciente en su cuerpo. Esta prueba generalmente se realiza como parte de un hemograma completo, un examen de rutina que verifica los niveles de varios componentes sanguíneos. Los niveles de hemoglobina que difieren de la norma pueden ser indicativos de una amplia variedad de problemas de salud, y esta prueba puede ser una herramienta de diagnóstico muy útil. Además, las personas pueden utilizar pruebas de hemoglobina para controlar el progreso de diversas afecciones médicas, como la anemia.

La hemoglobina es una proteína que se encuentra naturalmente en la sangre. Realiza una serie de funciones, pero una de las más importantes es el transporte de oxígeno por todo el cuerpo. En los adultos, el nivel de hemoglobina oscila entre 12 y 18 gramos por decalitro, siendo los niveles más bajos en las mujeres embarazadas. Los niños suelen tener entre 11 y 16 gramos por decalitro. Es posible que una prueba de hemoglobina revele números que pueden ser más altos o más bajos que la norma.

Los niveles bajos en una prueba de hemoglobina pueden indicar la presencia de problemas como anemia y desnutrición, mientras que los niveles altos están asociados con cosas como deshidratación y enfermedades cardíacas. También es posible realizar pruebas en la propia hemoglobina para conocer más sobre el estado del paciente. Una prueba de hemoglobina glucosilada o A1c, por ejemplo, verifica la cantidad de glucosa en la sangre, un indicador de diabetes mal controlada o de un mayor riesgo de desarrollar diabetes.

Para realizar una prueba de hemoglobina, se extrae una muestra de sangre de un paciente y se pasa a través de una centrífuga para separar los componentes primarios de la sangre para que puedan analizarse durante la prueba. Se pueden extraer varios viales de sangre si se han ordenado varias pruebas, por lo que solo se necesita un pinchazo de aguja para recolectar todas las muestras. Una vez que se ha analizado la sangre, se prepara un informe impreso para que el médico pueda utilizar la información para evaluar la condición de un paciente y desarrollar un plan de tratamiento.

Varias cosas pueden alterar los niveles de hemoglobina. Los niveles tienden a cambiar a lo largo del día, por ejemplo, lo cual es una consideración importante si alguien tiene un número inusualmente bajo o alto, pero por lo demás se siente saludable. Al entrevistar al paciente antes de solicitar la prueba, un médico puede hacerse una idea del estado general del paciente y utilizar esta información para evaluar los resultados de una prueba de hemoglobina.