¿Qué es el granuloma anular?

El granuloma anular es un tipo de erupción cutánea benigna que consiste en pequeños círculos de protuberancias rojizas. Por lo general, aparece en el dorso de las manos o en la parte superior de los pies, aunque el sarpullido puede aparecer en otras partes del cuerpo. Los médicos no tienen una comprensión clara de por qué se desarrolla el granuloma anular, pero se ha asociado con trastornos de la tiroides y diabetes. Las erupciones normalmente no causan síntomas físicos adversos, aunque una persona puede decidir someterse a un tratamiento con fines estéticos. Las cremas tópicas recetadas son eficaces para reducir el tamaño y la decoloración de las protuberancias.

La afección se observa con mayor frecuencia en niños pequeños, aunque una persona puede desarrollar un granuloma anular a cualquier edad. Por lo general, se aísla en una mano, un antebrazo o un pie. Las protuberancias elevadas suelen tener menos de media pulgada (aproximadamente 1.25 cm) de diámetro y emergen en grupos en forma de anillo. Por lo general, son más rojos que el tono de piel normal de la persona. La afección puede causar una picazón leve, pero el dolor y otros síntomas asociados con las erupciones cutáneas generalmente están ausentes.

La mayoría de los niños y adultos que experimentan granuloma anular gozan de buena salud, lo que hace que la afección sea confusa para los médicos. Algunos estudios han encontrado un mayor riesgo de la enfermedad en pacientes que sufren de desequilibrios hormonales, enfermedad de la tiroides o diabetes infantil. Además, el estrés puede influir en el desarrollo y la persistencia del sarpullido. En la mayoría de los casos, el granuloma anular desaparece por sí solo entre uno y dos años después de su aparición.

Una persona que nota una erupción inusual debe visitar a su médico de atención primaria para recibir un diagnóstico adecuado. Un médico puede examinar cuidadosamente las protuberancias y descartar otras posibles afecciones de la piel. La forma de la erupción a veces se asemeja a una infección por tiña, por lo que puede ser necesaria una biopsia de piel para detectar la afección. Después de hacer un diagnóstico, el médico puede explicar los detalles del granuloma anular y discutir las posibles opciones de tratamiento con el paciente.

Dado que el granuloma anular no es dañino, los médicos generalmente desaconsejan el tratamiento extenso. Algunas personas deciden buscar remedios médicos para mejorar la apariencia de sus manos o pies. Los corticosteroides tópicos recetados pueden ayudar a reducir la inflamación, encogiendo los bultos y promoviendo un tiempo de recuperación más rápido. Las lesiones muy grandes pueden cortarse o congelarse del cuerpo. Los pacientes que tienen problemas de salud subyacentes, como trastornos de la tiroides, pueden necesitar medicamentos especializados para controlar sus afecciones.