¿Cuáles son los problemas geriátricos más comunes?

Algunos de los problemas geriátricos más comunes incluyen el deterioro de la salud física y mental. Específicamente, problemas como la artritis, las enfermedades cardíacas, la ansiedad y la depresión tienden a afectar a las personas mayores en mayor medida que a otras personas. Varios problemas geriátricos pueden ser corregidos o curados por profesionales médicos y de salud mental, mientras que los trastornos progresivos, como la enfermedad de Alzheimer, no se pueden curar.

Los médicos que se especializan en medicina geriátrica tratan con regularidad una variedad de problemas de salud que afectan a los adultos mayores. Algunos médicos también ayudan a los pacientes a evitar ciertos problemas de salud geriátricos, como derrames cerebrales y fallas orgánicas, al ayudar a los pacientes a realizar cambios en el estilo de vida, que incluyen ejercicio, una dieta saludable y eliminar malos hábitos como fumar y el abuso del alcohol. Sin atención y tratamiento, los problemas geriátricos comunes como la diabetes, el colesterol alto y la hipertensión pueden poner en peligro la vida de los pacientes geriátricos.

Ciertas transformaciones físicas son parte natural del proceso de envejecimiento humano. Algunos de estos cambios incluyen una disminución de la visión normal, cambios de altura y cambios de peso. Algunos de estos pueden resultar bastante frustrantes, pero no se consideran una amenaza grave para la salud de las personas mayores.

Los problemas geriátricos comunes, como los que afectan el equilibrio, la movilidad y el habla de una persona, pueden causar depresión y ansiedad. Otros problemas geriátricos, como la pérdida del gusto, la audición y el olfato, pueden ser potencialmente peligrosos, especialmente para los adultos mayores que viven solos. La disminución de estos importantes sentidos a menudo deja a los adultos mayores vulnerables a accidentes y otras lesiones.

Las personas que se especializan en salud mental geriátrica también han descubierto que la depresión es un problema importante entre las poblaciones de ancianos. Si bien muchas personas asumen que la tristeza persistente, el pesimismo y la pérdida de interés en las actividades normales es una parte normal del envejecimiento, las investigaciones han revelado que estos síntomas se deben más probablemente a la depresión. Los estudios realizados sobre el cuidado de la salud geriátrica enfatizan la necesidad de un tratamiento de salud mental cuando los adultos mayores comienzan a mostrar síntomas de depresión, que también incluyen pérdida de peso involuntaria, disminución de los hábitos de aseo personal e incapacidad para experimentar alegría o placer.

Otros problemas geriátricos, como cambios hormonales, trastornos del sueño, cambios en la piel y deficiencias nutricionales, pueden requerir intervención médica y muchos se abordan mediante cambios en la dieta y el ejercicio. Problemas más graves, como cáncer de próstata, insuficiencia hepática, insuficiencia renal y enfermedades cardíacas, pueden incluso requerir tratamiento quirúrgico. Los problemas geriátricos leves, como sequedad de boca, problemas de visión y disfunciones sexuales, a menudo se pueden tratar con medicamentos y no se consideran potencialmente mortales.