¿Cuáles son los síntomas de la gota del codo?

Una persona que tiene gota en el codo probablemente experimentará dolor, malestar e inflamación. Estos síntomas pueden variar en intensidad dependiendo de la gravedad del caso. Muchas personas tienden a experimentar síntomas a altas horas de la noche o muy temprano en la mañana. A veces, los síntomas pueden ser tan dolorosos que pueden hacer que una persona no pueda realizar sus actividades diarias. No existe cura para ningún tipo de gota, incluida la que se presenta en el codo, pero existen medicamentos recetados que pueden ayudar a controlar los síntomas.

En muchos casos, el primer síntoma que una persona experimentará por la gota en el codo es el dolor, que puede durar varias horas antes de remitir. Una vez que el dolor desaparece, normalmente se convierte en un malestar persistente. También puede haber algunos signos visibles en el codo, como enrojecimiento de la piel, hinchazón y posiblemente descamación o descamación. Cuando los síntomas desaparecen, una persona puede pasar varias semanas o meses antes de que vuelvan a aparecer los problemas de gota.

La gota del codo ocurre cuando se acumulan grandes depósitos de ácido úrico dentro de la articulación del codo y se cristalizan. Además de afectar el codo, la gota también puede causar problemas en otras articulaciones, incluidos los dedos de los pies, las rodillas y los tobillos. Los hombres tienden a experimentar gota con más frecuencia que las mujeres, pero no es raro que las mujeres comiencen a tener ataques de gota una vez que han terminado de pasar por la menopausia. Los profesionales médicos normalmente tienen que realizar tanto un análisis de sangre como una prueba de líquido articular para hacer un diagnóstico firme en cualquier persona que experimente síntomas similares a los de la gota.

Aunque la gota en el codo suele ser dolorosa e incómoda para la mayoría de las personas que la padecen, hay cosas que pueden ayudar a aliviar el dolor durante los ataques, así como a prevenir que ocurran. Los analgésicos antiinflamatorios, disponibles tanto de venta libre como con receta, tienden a ayudar mucho a controlar el dolor relacionado con la gota. También hay varios medicamentos diferentes disponibles que evitan que el cuerpo produzca grandes cantidades de ácido úrico, lo que podría evitar que ocurran los ataques de gota. Las personas que experimentan una gota muy dolorosa en cualquier área del cuerpo pueden obtener un alivio inmediato y temporal con inyecciones de esteroides en las articulaciones. Estas inyecciones suelen ser muy útiles, pero no se pueden administrar con regularidad porque tienen problemas potenciales a largo plazo que podrían resultar si las inyecciones se administran con regularidad.