El animal más venenoso del mundo es la rana venenosa dorada (también llamada rana dardo dorado), seguida del pez globo Fugu. El nombre latino de la especie de la rana venenosa dorada es Phyllobates terribilis. Haciendo honor a su título de animal más venenoso del mundo, la rana venenosa dorada es tan letal que se sabe que ratones y perros mueren al caminar sobre una toalla de papel previamente tocada por la rana. La rana venenosa dorada no genera su veneno por sí misma, sino que lo obtiene al consumir escarabajos de la familia Melyridae. Actualmente se sabe si estos escarabajos son en realidad más venenosos que la rana que los consume, pero en realidad pueden merecer el título de animal más venenoso del mundo.
Una sola rana venenosa dorada contiene suficiente veneno para matar de 10 a 20 humanos adultos, mientras que el pez globo tiene suficiente veneno para matar a unos 30 humanos. La rana venenosa dorada se considera más venenosa porque su veneno es varias veces más letal en peso. Ambos venenos son 1200 veces más letales que el cianuro. La rana venenosa dorada se encuentra en la costa del Pacífico de Colombia, mientras que el pez globo fugu es cosmopolita.
Al ser el animal más venenoso, la rana venenosa dorada tiene una relación interesante con los humanos, al igual que el pez globo fugu. La rana venenosa dorada es la principal fuente utilizada por los nativos colombinos para crear dardos venenosos. La rana es capturada entre palos y luego mantenida cerca de un fuego. Bajo estrés, la rana comienza a liberar profusamente veneno en forma de pequeñas gotas que se escapan de su piel. Estas gotas se colocan en la cabeza de los dardos o flechas venenosas y luego se usan para cazar presas. Así envenenados, estos dardos pueden derribar casi cualquier cosa.
La relación del pez globo fugu con los humanos consiste en ser considerado un manjar de sushi en Japón. Ciertas partes específicas del fugu no son venenosas y un chef experimentado puede extraerlas e incluirlas en un plato de sushi. Si el chef se equivoca con sus cortes, el patrón muere. Varias personas mueren cada año por esto. Sin embargo, pequeñas cantidades del veneno hacen que el gourmet experimente una sensación de hormigueo única en la lengua, lo que probablemente contribuya a su leyenda como un manjar japonés.