¿Cuáles son las ventajas y desventajas de usar una crema de estrógeno de venta libre?

Al considerar una crema de estrógeno de venta libre para ayudar a aliviar los síntomas de la menopausia, es importante tener en cuenta tanto los pros como los contras. En el lado positivo, estas cremas están fácilmente disponibles y no requieren receta médica. También existe alguna evidencia de que pueden ayudar a reducir problemas como los sofocos y la sequedad vaginal. Desafortunadamente, su producción no está bien regulada, lo que significa que la cantidad de estrógeno en una crema puede ser muy diferente a la cantidad en otra, e incluso puede haber diferencias entre lotes de la misma marca. El uso de estas cremas también puede conllevar algunos de los mismos riesgos para la salud que el uso de cremas recetadas y no tiene el beneficio de la supervisión de un médico.

Uno de los principales beneficios de la crema de estrógeno de venta libre es su disponibilidad. Las mujeres que padecen síntomas de la menopausia pueden comprarlo fácilmente sin tener que esperar a ver a su médico. Es posible que puedan usarlo para encontrar un alivio rápido si los síntomas se vuelven extremadamente incómodos y no tienen otras opciones.

Usar una crema de estrógeno de venta libre no sería de mucha ayuda si no funcionara, pero algunas investigaciones han demostrado que puede aliviar los síntomas de la menopausia. La sequedad vaginal se puede reducir aplicando algunas cremas. Las mujeres preocupadas por la apariencia de su piel a medida que envejecen pueden encontrar que algunas cremas de estrógeno pueden reducir las arrugas y los poros dilatados. También existe alguna evidencia de que puede ayudar a controlar los sofocos.

Si bien existen beneficios potenciales de la crema de estrógeno de venta libre, la falta de regulación de su producción es una preocupación importante. A diferencia de las cremas recetadas, que normalmente incluyen una cantidad constante de estrógeno, las que se venden sin receta no están obligadas a seguir ningún estándar. Esto significa que el producto de una compañía puede ser muy diferente al de otra, lo que dificulta que las mujeres sepan cuánto estrógeno realmente están obteniendo. Si no se tiene cuidado durante la producción, incluso puede haber variaciones significativas entre lotes de productos en la misma línea.

Algunas mujeres pueden usar una crema de estrógeno de venta libre con la esperanza de que esto les ayude a evitar los posibles problemas de salud asociados con el reemplazo hormonal. Sin embargo, incluso si la crema contiene cantidades más bajas de estrógeno u otras hormonas que una prescripción, no hay pruebas de que aún no conlleve los mismos riesgos. El reemplazo hormonal puede causar algunos problemas graves, como cáncer y enfermedades cardíacas. El uso de un producto de venta libre también elimina al médico de la mujer, lo que significa que nadie está monitoreando estos problemas potenciales.