¿Cuáles son los diferentes ejercicios de terapia vestibular?

Los ejercicios de terapia vestibular generalmente están diseñados para superar los síntomas del tinnitus y otros trastornos vestibulares. Aunque los problemas vestibulares son más comunes en los adultos, el vértigo paroxístico también afecta a los niños. La terapia para ayudar a controlar los mareos y corregir el equilibrio o la coordinación asociados con esta afección puede incluir ejercicios de hombros y cuello. Las actividades simples de caminar también pueden incluirse en los ejercicios de terapia vestibular.

Alguien con ciertas anomalías dentro del sistema vestibular puede tener dificultades con el equilibrio y el equilibrio. Los ejercicios de terapia vestibular ayudan al cerebro a aprender a adaptarse a la energía transmitida por el sistema vestibular. Los ejercicios ayudarán al cerebro a interpretar correctamente cada transmisión, lo que permitirá a la persona realizar las actividades cotidianas sin perder el equilibrio ni marearse. Como resultado, se tolerarán mejor los movimientos simples de los ojos y la cabeza que son necesarios para el funcionamiento normal.

En muchos casos, los expertos recomiendan que el paciente realice de 15 a 20 series de cada ejercicio. La mayoría de los fisioterapeutas o médicos recomiendan que el paciente realice ejercicios de terapia vestibular dos o tres veces al día durante varias semanas hasta que mejoren los síntomas. Muchos ejercicios de terapia vestibular se conocen como ejercicios de cabeza. Algunos incluyen movimientos de flexión mientras está sentado, mientras que otros ejercicios implican girar la cabeza de un lado a otro. A medida que disminuyen los síntomas, el paciente puede cerrar los ojos mientras hace ejercicio.

Otro tipo de ejercicio vestibular se conoce como encogimiento de hombros. A medida que se encogen los hombros, es importante rotar la cabeza de un lado a otro. Las variaciones de este ejercicio de terapia vestibular se pueden aprender de un fisioterapeuta.

Alternar entre una posición sentada y de pie es otro de los ejercicios de terapia vestibular recomendados. El paciente debe comenzar con movimientos lentos y luego ir aumentando gradualmente a un ritmo más rápido. Esta actividad puede repetirse 15 veces, alternando entre ojos abiertos y cerrados. Otro tipo de actividad de pie puede implicar colocar una almohada u otro objeto blando debajo de los pies y mantener el equilibrio sin sostenerse de una silla u otro objeto. Para una estimulación adicional, esta actividad se puede realizar con los ojos cerrados o de pie sobre un pie.

Además de las diversas actividades de pie y sentado, también puede ser beneficioso volver a entrenar los ojos realizando una serie de ejercicios de observación. Estos ejercicios de terapia vestibular se realizan enfocándose en un objeto u objetivo desde una distancia específica. Al igual que con cualquiera de los ejercicios de terapia vestibular, los pacientes deben consultar con un médico antes de comenzar un programa.