El uso de pioglitazona para la diabetes es un tratamiento bastante eficaz, pero solo en pacientes que padecen diabetes tipo dos. La Agencia Europea de Medicamentos (EMA) y la Administración de Drogas y Alimentos de los EE. UU. (FDA) han aprobado el uso de pioglitazona para adultos que padecen diabetes tipo XNUMX, siempre que se use junto con dieta y ejercicio, para regular los niveles de glucosa en el cuerpo. El fármaco es a menudo el único curso de tratamiento posible para algunos pacientes que padecen diabetes y ha tenido resultados positivos en los ensayos clínicos.
La diabetes es una afección en la que el cuerpo no puede producir la cantidad necesaria de insulina para que el cuerpo utilice correctamente la glucosa. La insulina funciona como una «llave» para la «puerta» de las células y permite que la glucosa proporcione combustible al cuerpo. Existen dos tipos de diabetes: tipo uno y tipo dos. La diabetes tipo uno ocurre cuando las células que supuestamente producen insulina han sido destruidas, lo que hace que el cuerpo produzca muy poca o ninguna insulina. La enfermedad de tipo dos ocurre cuando se reduce la producción de insulina, lo que conduce a un exceso de glucosa en la sangre.
La pioglitazona es un medicamento diseñado específicamente para su uso con pacientes diabéticos y pertenece a una clase de medicamentos antidiabéticos conocidos como tiazolidinedionas. Estos medicamentos son específicamente para pacientes que padecen diabetes tipo dos. El uso de pioglitazona para la diabetes funciona porque el medicamento reduce la cantidad de glucosa presente en la sangre del paciente. Funciona al hacer que los receptores de insulina del cuerpo sean más receptivos a la insulina; sin embargo, el páncreas del paciente debe producir algo de insulina para que el medicamento funcione. Esta es la razón por la que la pioglitazona para la diabetes solo es un tratamiento eficaz cuando el paciente tiene diabetes tipo dos.
La eficacia de la pioglitazona para la diabetes se ha demostrado a través de ensayos clínicos, pero también se ha demostrado que el fármaco aumenta el riesgo del paciente de desarrollar cáncer de vejiga. Sin embargo, tanto la FDA como la EMA han considerado que este riesgo es insignificante en comparación con los beneficios del medicamento. Por lo general, el medicamento no se recetará a ninguna persona que haya padecido cáncer de vejiga o que tenga antecedentes familiares de cáncer de vejiga. A pesar de que el medicamento reduce los niveles de glucosa en la sangre y la cantidad producida por el hígado, solo se prescribe junto con la dieta y el ejercicio. La pioglitazona para la diabetes no es un tratamiento eficaz por sí solo y no se debe confiar únicamente en ella para mantener bajos los niveles de glucosa.