¿Cómo trato una herida infectada?

Idealmente, no se debe permitir que una herida progrese hasta el punto de la infección, pero si una herida se infecta, existen varias técnicas que pueden usarse para tratarla. El tratamiento de una herida infectada es importante para prevenir la propagación de la infección; Las complicaciones de las heridas infectadas pueden incluir una infección en el torrente sanguíneo, muerte generalizada del tejido que conduce a la amputación o incluso a la muerte en algunas situaciones.

Cuando se sufre una lesión, la herida debe lavarse bien con agua y jabón y mantenerse limpia mientras sana. Si la herida es extremadamente grande o profunda, es recomendable acudir a un hospital donde se pueda irrigar por completo y se puedan recetar algunos medicamentos profilácticos para ayudar a prevenir infecciones. En el caso de una herida punzante, puede ser necesario un refuerzo contra el tétanos, y si ocurre una mordedura de animal, se debe informar. Si se dispone de documentación, también es aconsejable confirmar que el animal tiene una vacuna antirrábica vigente, y si estos datos no están disponibles, puede ser necesario tomar algunas medidas para prevenir la aparición de la rabia.

Los signos de que una herida se ha infectado incluyen calor, hinchazón y cambios de color alrededor de la herida. Una herida séptica también puede tener una secreción maloliente que puede variar en color, dependiendo de la naturaleza de la infección. Las compresas calientes pueden ayudar a promover el drenaje de la herida para sacar el material infectado, y la herida también debe irrigarse y limpiarse al menos dos veces al día.

Si la infección permanece en un nivel bajo y comienza a resolverse en unos pocos días, una herida séptica se puede tratar de manera segura en casa. Sin embargo, si el paciente tiene fiebre, la infección parece extenderse o aparecen rayos de decoloración alrededor de la herida, es hora de recibir atención profesional. Un médico puede irrigar y drenar completamente la herida, colocar drenajes si es necesario para mantener despejada la vía de drenaje y recetar medicamentos para matar los microorganismos en la herida.

Para alguien con un sistema inmunológico comprometido, una herida infectada puede representar un riesgo para la salud muy grave. Estas personas deben comunicarse con sus médicos si aparecen signos de infección para obtener consejos sobre el tratamiento o para programar una cita para una visita al consultorio del médico.

Los pacientes a veces son tímidos a la hora de contactar a un médico por un problema que creen que es menor. Si no está seguro de si una herida infectada necesita atención médica, llame al consultorio de su médico o al hospital y pida hablar con una enfermera. La enfermera puede repasar sus síntomas con usted y determinar si necesita o no ver a un profesional médico para recibir tratamiento.