Por lo general, elegir el mejor organizador de cocina puede ser mucho más fácil si primero considera qué elementos necesita tener fácilmente accesibles. Almacenar artículos de cocina de uso poco frecuente en áreas más apartadas, como en el espacio entre el techo y los gabinetes o en la parte posterior de los estantes de los armarios, puede liberar más espacio para colocar los productos organizadores. La organización por áreas, como cajones, gabinetes y encimeras, puede simplificar aún más el proceso.
Los organizadores de tapas de ollas pueden ser especialmente útiles en la cocina, ya que eliminan la frustración de tener que buscar tapas que se hayan deslizado en la parte trasera de un armario. A menudo, no hay suficiente espacio en los gabinetes de la cocina para almacenar cada tapa en su olla correspondiente, ya que las ollas y sartenes deberán apilarse para ahorrar espacio. Un organizador de tapa de olla que cabe en el interior de la puerta de un armario tiene varias tapas y las hace fácilmente accesibles para un cocinero apurado. Una alternativa a este tipo de organizador de cocina es instalar una rejilla para ollas y tapas en la pared de la cocina o suspenderla del techo.
El organizador de gabinete circular giratorio y escalonado llamado Lazy Susan es una forma popular de almacenar productos alimenticios. Hay tamaños de Lazy Susan para gabinetes grandes y pequeños, así como estilos hechos para armarios de esquina. Dado que los niveles de plástico, madera o metal giran cuando se mueven con la mano, llegar a esos alimentos en la parte posterior del gabinete es bastante simple. Las cajas o recipientes de plástico de cereales, arroz u otros productos son ideales para estos organizadores más grandes, mientras que los más pequeños pueden ser perfectos para mantener al alcance de la mano pequeños recipientes de artículos de cocina como condimentos, miel y condimentos.
Los organizadores de cajones más populares incluyen bandejas seccionadas y pequeños contenedores de plástico o metal. Estos pueden organizar los diferentes contenidos de un «cajón de basura» o mantener como cubiertos apilados juntos. Si bien una bandeja de plástico o un organizador de cocina para contenedores es bastante común y económico, los tipos de malla metálica pueden verse mucho más elegantes.
Si tiene una cocina pequeña o una que carece de gabinetes y cajones, elegir un organizador de pared puede ser una buena idea. Este tipo de organizador de cocina es una barandilla de metal que se adhiere a la pared. Los clips de metal en forma de S cuelgan de la barra o barandilla montada en la pared para sostener utensilios de cocina, agarraderas y similares. Muchos de estos sistemas de organización de pared tienen accesorios que se ajustan a la barra básica, como una taza para guardar cubiertos, un juego de estantes abiertos o incluso una rejilla para secadora de platos plegable.