El carbón residual es un subproducto del procesamiento del carbón, que contiene carbón, junto con oligoelementos, suciedad y otros materiales. Es potencialmente utilizable para una variedad de aplicaciones, aunque existen preocupaciones ambientales asociadas con la recuperación y el uso de carbón residual. Dependiendo de la jerga regional, se utilizan una variedad de términos coloridos para referirse a este producto de carbón, incluidos gob y culm. Por lo general, se recolecta en grandes pilas cerca de una instalación de procesamiento de carbón.
Un uso potencial del carbón residual es un combustible. Se puede quemar directamente o limpiar y quemar para generar electricidad y muchas plantas de energía están equipadas para manejar el carbón residual, aunque es menos eficiente que el carbón convencional. El procesamiento también se puede utilizar para extraer metales utilizables en el carbón para usos industriales. En algunas regiones, las pilas de carbón residual se han convertido en sitios recreativos y se han recuperado con el uso de vegetación.
Una de las preocupaciones ambientales clave es la presencia de varios contaminantes en el carbón. Estos pueden incluir metales pesados. Una pila de desechos mal controlada puede filtrarse al ambiente circundante, introduciendo mercurio y otros materiales en el suelo, el aire y el agua. Cuando se quema el carbón residual, estos productos pueden liberarse al medio ambiente a través de las chimeneas de ventilación y se genera una gran cantidad de cenizas de carbón potencialmente tóxicas. Esta ceniza de carbón debe eliminarse de alguna manera y es difícil eliminarla debido a los contaminantes que contiene.
En las regiones del mundo donde la minería del carbón se ha practicado durante generaciones, se pueden ver pilas de carbón de desecho abandonadas. Muchas naciones ahora prohíben la práctica de abandonar los desechos mineros y las empresas deben tomar medidas para eliminar o controlar el carbón residual si planean cerrar una mina. Las empresas también son responsables de la contaminación relacionada con el carbón. Los planes de remediación ambiental pueden presentarse a la comunidad con el objetivo de obtener la aprobación de un método particular de tratar con el carbón.
Existe cierta controversia sobre cómo manejar los desechos mineros como el carbón en algunas comunidades. El gran volumen de muchas pilas de desechos es un problema importante, ya que los planes para manipular el material deben considerar la gran cantidad de carbón involucrado. Algunas comunidades apoyan dejar las pilas en su lugar a pesar de los problemas de lixiviación, mientras que otras quieren que se las lleve a otro lugar, y esto genera preocupaciones sobre la transmisión de la contaminación a otras regiones. Además de los residuos, muchas empresas también deben ocuparse de los relaves, materiales que se lixivian del carbón mientras se procesa. Los relaves no tienen ningún uso y suelen ser muy tóxicos.