Un juego de biorretroalimentación es un juego que se controla a través de la entrada de dispositivos de biorretroalimentación. El paciente controla el juego con su cuerpo, y el juego responde a cosas como cambios en la frecuencia cardíaca, la presión arterial, la sudoración y la temperatura de la piel. Estos juegos se utilizan en entornos terapéuticos para una amplia variedad de propósitos, y también pueden ser de naturaleza recreativa.
En un juego de biorretroalimentación, las personas navegan por el juego cambiando algo en su cuerpo. Este cambio puede ser consciente o inconsciente. Por ejemplo, los cambios en la frecuencia respiratoria pueden ser manipulados por un jugador, mientras que el pulso depende de cambios fisiológicos en el cuerpo que el jugador no puede controlar. Estos juegos a menudo se diseñan siguiendo un modelo de recompensa, y el juego recompensa al jugador cuando logra un cambio deseado.
Por ejemplo, un juego diseñado para ayudar a las personas a relajarse y promover el manejo del estrés recompensaría a los jugadores por reducir la presión arterial, la sudoración y la frecuencia cardíaca. Alguien podría atravesar puertas, construir algo o participar en otras actividades reduciendo el estrés, mientras que el juego presentaría obstáculos cuando el jugador estaba obviamente en un estado estresado. Los juegos de biorretroalimentación se pueden usar en psicoterapia, para ayudar a los pacientes a superar situaciones estresantes, y también se pueden usar en estudios de imágenes médicas del cerebro, con el paciente controlando el juego mientras se escanea el cerebro para recopilar información sobre la actividad cerebral.
Para jugar un juego de biorretroalimentación, un jugador debe estar conectado a dispositivos que proporcionarán información para el juego. Los jugadores pueden usar guantes, monitores de frecuencia cardíaca, etc. El juego puede presentarse en una pantalla o dentro de una visera, con algunos juegos de biorretroalimentación orientados hacia un modo de juego de realidad virtual, en el que el jugador se siente inmerso dentro del juego. Muchos de estos juegos adoptan una forma de narración o narrativa, con el jugador trabajando a través de una serie de escenas o acertijos con el juego.
Los diseñadores de juegos de biorretroalimentación trabajan en muchas áreas del mundo. Algunos trabajan con miembros de la profesión médica o psicoterapéutica para desarrollar juegos que pueden usarse en terapia, mientras que otros trabajan de forma independiente, desarrollando juegos diseñados principalmente para divertirse. Algunos juegos aprovechan la tecnología muy avanzada, que está mejorando todo el tiempo, lo que permite que los juegos se vuelvan más complejos e involucrados. Las personas que estén interesadas en jugar un juego de biorretroalimentación pueden acceder a uno a través de un centro de juegos en su comunidad, o mediante un proveedor de terapia que use tales juegos en el tratamiento.