¿Qué es una Clínica Legal?

Una clínica legal es una instalación dirigida por una facultad de derecho para brindar servicios gratuitos al público mientras capacita a sus estudiantes en la práctica del derecho clínico. Los estudiantes de derecho trabajan en una clínica legal para obtener créditos escolares y ganar experiencia en el manejo de problemas legales reales. Las clínicas legales son populares en muchos países diferentes y pueden marcar una gran diferencia para las comunidades locales al ofrecer servicios pro bono a aquellos que no pueden pagar un abogado.

Algunos expertos en educación creen que, al igual que los estudiantes de medicina, los estudiantes de derecho pueden aprender mejor cuando se les brinda la oportunidad de poner en práctica sus habilidades. Al permitir que los estudiantes se reúnan con clientes, presenten reclamos, investiguen casos y manejen casos reales, una clínica legal ayuda a arraigar el conocimiento adquirido en las aulas en la práctica de futuros abogados. Los estudiantes suelen trabajar bajo una estricta supervisión y rara vez se les permite presentar casos orales en los tribunales. Sin embargo, tienen la oportunidad de trabajar en estrecha colaboración con los clientes durante el transcurso del caso, actuando como lo haría un abogado profesional.

Las clínicas legales pueden ofrecer una variedad de superficies diferentes y pueden especializarse en diferentes áreas del derecho. Algunas especialidades pueden incluir derecho tributario, derecho de inmigración, derecho penal, derecho ambiental, derecho de familia y servicios legales civiles comunitarios básicos. Una escuela de derecho grande en un área urbana puede operar varias clínicas legales en toda la ciudad, dando a los estudiantes la oportunidad de probar su interés y habilidad en diferentes áreas del derecho.

Además de brindar experiencia de capacitación a los estudiantes, abrir una clínica legal puede ayudar a la escuela a participar en la mejora de la comunidad. Los abogados son muy caros en la mayoría de los casos, y el resultado es que la justicia a menudo solo puede ser administrada por quienes tienen fondos suficientes. Las clínicas legales pueden ayudar a manejar problemas serios en una comunidad, como abuso doméstico, tenencia de barrios marginales, problemas de pandillas y asuntos relacionados con la ley de ancianos. Algunas corporaciones y organizaciones sin fines de lucro otorgan subvenciones para financiar clínicas legales con la esperanza de inspirar a más escuelas a crear estos programas.

Cualquier ciudadano puede visitar una clínica legal para obtener asistencia, aunque en áreas con múltiples clínicas, la asistencia puede desglosarse por área geográfica o asuntos legales manejados en un lugar en particular. Si bien gran parte del trabajo lo realizan los estudiantes, lo hacen bajo supervisión regular, por lo que los clientes pueden estar seguros de que están recibiendo un asesoramiento legal justo. La popularidad de las clínicas legales es tal que puede haber una lista de espera para recibir asistencia; en una situación de emergencia, los clientes deben tratar de explicar la necesidad urgente y preguntar si existe un proceso acelerado.