Un verificador de boletos es una persona que examina los boletos antes de permitir que las personas ingresen a áreas solo accesibles para los titulares de boletos válidos. Los verificadores de boletos pueden trabajar en diferentes industrias, desde entretenimiento hasta transporte. No hay requisitos especiales para hacer este trabajo y, por lo general, es un trabajo de verano, temporal o informal, aunque a veces hay posibilidades de avance para las personas en puestos de verificación de boletos.
En el transporte, los verificadores de boletos son parte del equipo de aplicación de la ley que confirma que todas las personas sentadas en autobuses, trenes, transbordadores y otros medios de transporte tienen un boleto válido. Para algunos tipos de trabajos de transporte, el verificador de boletos también puede actuar como un agente de puerta, brindando asistencia a las personas que necesitan ayuda y asegurando que el equipaje y las pertenencias se carguen de manera segura. En los aeropuertos, los verificadores de boletos pueden estar afiliados a seguridad, en cuyo caso se requiere capacitación como agente de seguridad para el puesto.
Los lugares de entretenimiento comúnmente usan boletos para controlar el acceso, y los verificadores de boletos son responsables de verificar los boletos de las personas que intentan ingresar al lugar. Confirman que las entradas son válidas para el evento y pueden rasgar, perforar o marcar las entradas para que no se puedan reutilizar. Si se utilizan asientos asignados, los revisores de boletos también pueden proporcionar a las personas instrucciones para ayudarlos a encontrar sus asientos. Pueden trabajar con ujieres en los casos en que las personas tienen dificultades para encontrar asientos o necesitan acomodación para sillas de ruedas y otros dispositivos de movilidad.
Las personas deben poder pararse de pie durante largas horas e interactuar cómodamente con los miembros del público para trabajar en este tipo de puestos. Si bien algunos lugares ofrecen asientos a sus taquilleros, es más común pararse, ya que puede ser necesario levantarse para mostrar los asientos de las personas y proporcionar otras formas de asistencia. Las personas también deben estar atentas, vigilando a las personas que intentan ingresar sin boletos. Un inspector de boletos también puede recibir instrucciones de buscar revendedores, personas que compran boletos e intentan revenderlos a un precio más alto.
Para ciertos tipos de puestos de comprobador de entradas, puede ser necesaria una capacitación especial. Esto es más común en el transporte, donde existen inquietudes sobre la aplicación de la ley, además de las preocupaciones sobre las personas que ingresan a un lugar sin pagar. Algunas agencias de transporte prefieren usar su propia seguridad o policía capacitadas para revisar los boletos, mientras que otros simplemente pueden indicar a los inspectores de boletos que soliciten ayuda de seguridad si hay un problema.