Siddhasana, también conocida como «pose perfecta», es una de las poses más comunes para la meditación utilizada en hatha yoga y otras formas de yoga. Una postura sentada simple, siddhasana se puede mantener durante un largo período de tiempo, por lo que es una buena asana para practicar la respiración, la meditación y la concentración. Aunque la posición básica es bastante simplista, algunos expertos en yoga creen que siddhasana fortalece el piso pélvico y los músculos de los muslos, y también sugieren que puede estimular la energía sexual.
Para lograr siddhasana, el practicante debe sentarse en una posición cómoda con las piernas estiradas y la columna recta. Doblando la rodilla izquierda, el pie izquierdo es llevado hacia la pelvis. Idealmente, el talón izquierdo debe descansar contra el perineo. La pierna derecha está doblada y el talón derecho descansa sobre el pie izquierdo, presionando el área púbica. Los principiantes pueden tener dificultades para colocar los pies en las posiciones correctas; Es importante recordar que la posición debe ser sostenible y cómoda, por lo que los profesionales solo deben estirar las piernas tanto como sea cómodo al principio.
Los brazos en siddhasana se pueden colocar en varias posiciones diferentes. Algunas personas prefieren permitir que sus manos descansen sobre sus muslos, dejando que los brazos cuelguen sueltos de los hombros. Otros pueden preferir poner las manos en posición de oración, o sostenerlas una encima de la otra frente al estómago. Para ayudar a enderezar la columna vertebral mientras está en una postura perfecta, puede ser útil colocar las manos en el piso detrás del cuerpo, presionando las manos para alargar la columna vertebral.
Una vez correctamente alineados dentro de la pose, el enfoque se vuelve hacia adentro hacia prácticas meditativas y se enfoca en la respiración. Siddhasana a menudo se realiza al comienzo de la práctica de yoga, como un medio para enfocar la mente en la práctica que se avecina. También se puede hacer cerca del final de una sesión de yoga, como un intento de sellar la mentalidad y la tranquilidad de la práctica en la mente y el cuerpo. Sumérgete en la pose en cualquier momento puede ser una buena manera de aliviar el estrés, calmar la mente y evitar el pánico o la ansiedad.
Para aquellos que sufren lesiones en la parte baja de la espalda, puede ser útil realizar la postura sentada sobre una manta doblada o apoyada contra una pared. Las personas con caderas o muslos inflexibles pueden colocar un bloque de espuma debajo de cada rodilla para ayudar a liberar la tensión en las piernas y las caderas. Las personas que tienen dificultades con las posturas con las piernas cruzadas pueden querer probar la varjasana como alternativa a la siddhasana. Varjasana es una pose meditativa realizada en una posición de rodillas y puede ser más cómoda para las personas con problemas de cadera, muslo o espalda baja.