La cebada perlada es el nombre dado a los granos de cebada con su capa de casco y salvado eliminada, dejando un exterior redondeado y pulido. Estos granos se cocinan más rápido que aquellos con la capa de salvado intacta, y por esta razón a veces se venden como cebada de «cocción rápida» o «preparación fácil». A pesar de perder su capa de salvado nutritiva durante el procesamiento, la cebada perlada se considera un alimento saludable, ya que contiene una serie de vitaminas y minerales esenciales. Comúnmente se come solo o se agrega a sopas y guisos; También se puede utilizar en la alimentación animal o en granjas industriales.
Cómo se procesa
La cebada es un grano que, en la naturaleza, crece encerrado en un casco duro. Los humanos no pueden digerir el casco, y siempre se lo quita, ya sea por máquinas o por los propios consumidores, antes de que el grano se cocine o se coma.
Debajo del casco hay una capa de salvado. El salvado presta una textura áspera y sabor a nuez, así como una cantidad significativa de fibra. La mayor parte de la cebada que se vende comercialmente tiene esta capa de salvado intacta. La mayor excepción es la cebada perlada: para lograr la superficie lisa y brillante tan característica de esta variación, se debe eliminar la capa de salvado. Esto casi siempre se realiza mecánicamente, generalmente en una planta procesadora de granos. La capa de salvado se empapa o se frota, y el grano resultante se enjuaga, se seca y se empaqueta para la venta.
Valor nutricional
A pesar de haber perdido su capa de salvado nutritiva, las perlas de cebada todavía se consideran un grano integral y tienen muchos beneficios nutritivos. Las perlas son ricas en proteínas, hierro y fibra natural, y también contienen pequeñas cantidades de calcio. Como todos los otros tipos de cebada, las versiones perladas también son muy bajas en grasa. Algunos estudios médicos sugieren que comer regularmente cebada y otros granos integrales puede ayudar a regular el azúcar en la sangre, lo que puede ser especialmente beneficioso para los diabéticos. También puede ayudar a bajar el colesterol.
Preparación básica
Cocinar cebada perlada suele ser muy simple. El grano generalmente se puede preparar tal como lo estaría el arroz, es decir, al hervirlo a fuego lento en una pequeña cantidad de agua hirviendo, luego esperar a que se absorba esa agua. La densidad del grano significa que a menudo tomará más tiempo cocinar que el arroz blanco básico, pero generalmente no es más complicado. Muchas ollas arroceras comerciales también se pueden ajustar para cocinar cebada perlada.
La mayoría de las recetas que requieren “cebada” pueden tomar variedades perladas o sin cáscara. Los granos con su capa de salvado aún intacta tardarán más en cocinarse, pero los dos son básicamente intercambiables en términos de sabor y textura.
Usos culinarios
Los cocineros pueden ser muy innovadores con preparaciones de cebada perlada. El grano a menudo se sirve como guarnición o como cereal caliente, generalmente con leche o miel. Algunos también eligen tirarlo a las ensaladas. Las perlas crudas se agregan comúnmente para espesar sopas y guisos, también, lo que brinda un impulso nutricional y a menudo mejora la textura general y la calidez.
Consumo industrial y agrícola
La cebada perlada también se puede utilizar en la alimentación animal. Esto es a menudo lo que les sucede a las perlas que están deformadas o no se separan por completo de su capa o casco de salvado. En lugar de desperdiciar los granos dañados, los fabricantes los envían a plantas de procesamiento de ganado donde proporcionan una nutrición útil a una variedad de animales de granja.