Ase las patas de pollo colocándolas en una parrilla de 15 a 18 centímetros (6 a 7 pulgadas) de la fuente de calor, dejando la piel puesta, cubriendo la superficie de la parrilla con aceite y girando las patas de pollo sin perforarlas. Verifique que las piernas estén hechas usando un termómetro para carne o perforándolas y verificando el color de los jugos. Otros consejos que pueden ayudar a los chefs a asar las patas de pollo incluyen colocar trozos más pequeños en el exterior para igualar los tiempos de cocción y precalentar el asador antes de agregar las patas. Cepillar las patas de pollo con aceite de oliva y especias puede ayudar a mejorar el sabor de la carne asada.
Los cocineros deben dejar la piel puesta al intentar asar las patas de pollo. Asar a la parrilla es esencialmente como asar a la parrilla, ya que los alimentos se cocinan con calor seco y tienden a secarse. El hueso en las patas de pollo ayudará a que la carne se mantenga húmeda, pero la piel también es importante para retener la humedad. Sin embargo, algunas personas pueden encontrar la grasa en la piel poco atractiva. La piel se puede quitar, pero esto generalmente dará como resultado patas de pollo un poco más secas.
La distancia desde la fuente de calor puede tener un gran efecto cuando se trata de asar patas de pollo. Si la carne se coloca demasiado cerca de la fuente de calor, puede sobrecocinarse y demasiado lejos puede aumentar los tiempos de cocción. La mayoría de los chefs recomiendan colocar el asador a una distancia de 15 a 18 centímetros (6 a 7 pulgadas) de la fuente de calor, que generalmente es el estante central del horno. El asador se debe precalentar durante unos 10 minutos para garantizar una cocción uniforme y un resultado húmedo.
Voltear las patas de pollo con un tenedor crea pinchazos en la carne, lo que permite que los jugos goteen. La principal preocupación de los chefs cuando intentan asar las patas de pollo es la tendencia de la carne asada, y particularmente el pollo, a secarse. Permitir que los jugos escapen de la piel perforada puede hacer que la carne cocida se seque. Si las patas de pollo se cocinan demasiado por un lado, los chefs deben voltearlas sin usar un tenedor. Un par de pinzas es la mejor herramienta para este trabajo, ya que permiten que el chef agarre firmemente las piernas.
Es importante sazonar las patas de pollo antes de asarlas. El pollo tiene un sabor relativamente suave y puede ser suave si no está sazonado. Los cocineros deben agregar sal y pimienta a la piel de las patas de pollo, junto con un poco de aceite de oliva, antes de cocinar. Los adobos se pueden usar para dar más sabor a la carne, y algunas hierbas mixtas también pueden agregar sabor. El pollo combina bien con hierbas como el tomillo.