El chicle de clavo es un tipo de chicle con sabor a clavo. El sabor distintivo lo ha convertido en un artículo codiciado, y dado que solo un fabricante produce la versión original, a veces puede ser difícil de encontrar. Los fanáticos a menudo son buenos para rastrear nuevos proveedores, y cuando el sabor se lanza al mercado, los aficionados a los ojos agudos tienden a adquirirlo rápidamente.
Este tipo de chicle ha sido fabricado desde 1914 por la empresa Thomas Adams. La producción comercial de chicles data solo de mediados de 1800, por lo que el chicle de clavo es una de las gomas con sabor más antiguas que se venden continuamente en el mercado. Fue especialmente popular en la era de la Prohibición, cuando las personas creían que podían ocultar el olor del alcohol en el aliento al masticarlo. Desde entonces, Adams Company ha sido adquirida por el gigante de los dulces Cadbury, y hoy se conoce como Cadbury Adams.
Muchas personas ven el chicle como nostálgico o anticuado porque ha estado en producción continua durante mucho tiempo y está estrechamente relacionado con la década de 1920. Cadbury Adams continúa usando el mismo empaque que usó en 1914 para capitalizar el factor de nostalgia, y la fórmula también ha permanecido esencialmente igual. Cadbury Adams también fabrica chicle Black Jack, otra famosa marca de chicle vintage con sabor a anís.
Debido a que la mayoría de las personas solo aceptan Adams Clove Gum como el original, están limitadas por la disponibilidad de la compañía. Este sabor solo se fabrica cada pocos años, y aunque se produce en grandes lotes, los vendedores de dulces y chicles generalmente se agotan en cierto punto. Se recomienda a los fanáticos que se abastezcan cuando lo encuentren en el mercado y que aprovechen los numerosos proveedores nostálgicos de dulces en Internet para realizar un seguimiento de los suministros cuando estén disponibles.
Además del chicle Clove y Black Jack, Cadbury Adams produce el chicle Beemans, que tiene un sabor a menta, también en cantidades limitadas. Beemans fue inventado por un médico de Ohio a fines del siglo XIX. Si bien la producción se detuvo brevemente debido a una disminución en el interés, la goma de mascar se volvió a lanzar al mercado en 1985 con gran éxito popular cuando se comercializó como parte de una campaña de nostalgia. La escasez de las tres marcas de chicle sin duda se suma al atractivo.