La investigación científica ha establecido que existe una relación causal entre el estradiol y el cáncer, con el estradiol, una hormona, que aumenta el riesgo de cáncer al promover el crecimiento maligno de las células mamarias. Esta relación causal negativa es más probable cuando hay abundancia de insulina en el cuerpo. El estradiol, una forma de estrógeno, desencadena específicamente la expansión de ciertas células mamarias MCF-7 que tienen receptores de estrógeno (ER), han descubierto los científicos. Los investigadores creen que estas células ER positivas, cuando se estimulan, desencadenan un ciclo de crecimiento celular injustificado, a menos que haya una ausencia de insulina. Sin insulina y sin células receptoras de estrógeno, es posible que el estradiol no engendre el crecimiento de células malignas, según las investigaciones.
La conexión entre el estradiol y el cáncer puede ser el resultado de algo más que la capacidad del estradiol para hacer que las células sinteticen ADN y comiencen a proliferar. Los científicos creen que los radicales de oxígeno son otro factor clave para que el estradiol se convierta en un verdadero riesgo de cáncer. Los estudios han indicado desde hace mucho tiempo que los radicales libres de oxígeno pueden provocar cáncer al dañar células que de otro modo serían sanas; El estradiol, según los estudios, es peligroso porque puede producir sus propios radicales libres de oxígeno en las células ER-positivas. Si bien el estradiol está relacionado principalmente con el cáncer de mama, también puede causar cáncer de útero y endometrio.
En cantidades normales, el estradiol y el cáncer no están relacionados. El estradiol es realmente necesario y beneficioso para las mujeres porque gobierna el desarrollo femenino adecuado. Por ejemplo, el estradiol, que se produce de forma natural en el cuerpo de la mujer todos los días, guía el desarrollo y el mantenimiento del útero, los senos y las trompas de Falopio de la mujer. Esta hormona esteroidea también gobierna cómo se deposita la grasa en el cuerpo de una mujer, guiando la forma de su figura. Junto con otras dos formas de estrógeno, estriol y estrona, el estradiol ayuda a regular la menstruación femenina y el embarazo.
Los riesgos de cáncer surgen cuando la presencia de estradiol en el cuerpo es excesiva; a veces esto es causado por medicamentos que contienen estradiol de otras fuentes animales. Esta suplementación terapéutica con estradiol a menudo forma parte de la terapia de reemplazo hormonal femenina para afecciones como la menopausia. La hormona también puede estar presente en algunas formas de control de la natalidad, así como en ciertos cosméticos. Estas exposiciones ambientales y médicas aumentan el riesgo de que las mujeres se encuentren con el vínculo peligroso entre el estradiol y el cáncer.
Además, dado que el estradiol se usa ocasionalmente en algunos medicamentos veterinarios, los rastros de la hormona pueden terminar en algunas carnes y leche, según algunos informes médicos. El vínculo entre el estradiol elevado y el cáncer se puede combatir con medicamentos antiestrógenos. Los médicos han descubierto que ciertos antiestrógenos esteroides pueden detener el crecimiento del cáncer a partir del estradiol e incluso prevenirlo por completo.