La administración de dispositivos móviles es un término colectivo que tiene que ver con las herramientas utilizadas para manejar la distribución de datos, aplicaciones y configuraciones en varios tipos de dispositivos móviles. Un buen ejemplo serían las herramientas que hacen posible la funcionalidad de los teléfonos móviles. El objetivo final de la gestión de dispositivos móviles es hacer uso de estas herramientas de una manera que proporcione un alto nivel de eficiencia de trabajo al dispositivo, pero que lo haga con un mínimo de gastos y mantenimiento requeridos.
Los dispositivos de comunicaciones móviles funcionan con una combinación de componentes locales y remotos que deben configurarse para interactuar si se quiere que el dispositivo funcione correctamente. Como conjunto básico de componentes, el proceso de administración de dispositivos móviles incluirá la supervisión de algún tipo de componente de servidor y un componente de cliente. El servidor es el que recibe y transmite los comandos de gestión al dispositivo real. En el extremo opuesto, el componente del cliente recibe los comandos, transmite los datos a los programas apropiados que se ejecutan en el dispositivo y ejecuta una orden para obedecer los comandos.
Con el tiempo, el proceso de administración de dispositivos móviles, o MDM, se ha vuelto más preciso y eficiente. En un momento, el proceso de configuración tenía que tener lugar en un entorno cableado, con un enlace cableado directo entre el servidor y el cliente necesario para realizar cambios o actualizaciones permanentes. Los continuos avances en las comunicaciones inalámbricas ahora han hecho posible enviar los comandos a través de la señalización inalámbrica y lograr los mismos resultados. Además de simplificar el proceso, la administración de dispositivos móviles hoy en día también puede ejecutar una gama más amplia de pedidos que en el pasado.
Junto con la configuración remota y el aprovisionamiento de nuevas aplicaciones, la administración de dispositivos móviles también se puede utilizar para realizar copias de seguridad de archivos y aplicaciones en una ubicación remota, recuperar esas copias en caso de que sea necesario restaurar datos en el dispositivo móvil e incluso administrar la instalación remota de software para actualizar las aplicaciones que ya están en el dispositivo. El diagnóstico remoto también es posible dentro de los perímetros de la administración de dispositivos móviles, lo que significa que muchos problemas operativos que solían requerir el envío del dispositivo móvil a un centro de servicio ahora pueden diagnosticarse y repararse en un entorno remoto.