Los clinómetros son dispositivos de medición que se pueden utilizar en varias profesiones diferentes. También conocido como inclinómetro, la función esencial del dispositivo es determinar medidas precisas en lo que respecta a la pendiente, la altura y la distancia. El clinómetro se utiliza a menudo en la profesión de meteorología, así como en la silvicultura y la topografía.
Una de las aplicaciones más comunes del clinómetro tiene que ver con la medición de ángulos, ya que se relacionan con la pendiente de formaciones naturales o edificios y otros proyectos de construcción humana. La idea es medir el ángulo con miras a identificar cualquier pendiente, con respecto a la gravedad involucrada. El clinómetro se puede utilizar para medir inclinaciones y descensos, según la perspectiva de la persona que calcula las medidas.
Junto con la medición de pendientes, el clinómetro también se utiliza en el campo de la silvicultura. Al medir las formaciones naturales que se encuentran en áreas boscosas, el inclinómetro también se utiliza como un medio para medir la altura de los árboles. Utilizando el haz dirigido que emite el dispositivo, es posible determinar la altura sin tener que utilizar medios convencionales para medir realmente el árbol.
El clinómetro también es útil para los meteorólogos que desean medir la altura de las nubes durante la noche. Una vez más, al hacer uso del haz de luz estrecho que emite el dispositivo, es posible apuntar el haz a un punto en las nubes y medir qué tan lejos de la superficie de la tierra se encuentra la formación de nubes. Esto puede ayudar al meteorólogo a predecir con precisión una serie de condiciones meteorológicas diferentes.
El clinómetro existe desde principios del siglo XX. Las primeras versiones se basaban en gran medida en los pesos como medio para determinar la pendiente y la distancia. Las encarnaciones posteriores del clinómetro hicieron uso de tubos de vidrio curvos llenos de algún tipo de líquido amortiguador y una bola de acero para trazar ángulos y pendientes. Hoy en día, el uso de sensores electrónicos es un componente importante en el diseño y funcionamiento del clinómetro moderno.