La escoliosis es una deformidad de la columna que causa una curvatura lateral en forma de S o C. Muchas personas no tienen la columna vertebral perfectamente recta, pero los profesionales médicos tienden a esperar hasta que la curvatura supere los diez grados para diagnosticar la escoliosis. Una desviación de la columna vertebral de 10 ° no es fácilmente detectable; solo puede aparecer como una ligera caída en un hombro o una cintura ligeramente desigual. Algunas personas pueden tener una desviación de hasta 30 ° sin un dolor perceptible. Una curva C es más común que una curva S. La forma de S generalmente se forma cuando la columna intenta autocorregir la desviación de la forma de C original.
Algunos informes muestran que hasta el 25% de las personas tienen escoliosis, pero la forma más grave solo afecta aproximadamente al 3%. La mayoría de los incidentes son idiopáticos, lo que significa que se desconoce la causa. Las niñas, especialmente las que se encuentran en la etapa de crecimiento prepuberal, tienen muchas más probabilidades de desarrollar escoliosis que los niños. Esto puede estar relacionado con los brotes de crecimiento más tempranos que experimentan las niñas, generalmente entre las edades de 10 y 14 años. La aparición de escoliosis en la edad adulta es rara. Las afecciones neuromusculares como la EM o una postura extremadamente deficiente pueden provocar una curvatura pronunciada de la columna.
La mayoría de las personas con escoliosis superan la afección con la edad o se someten a una cirugía correctiva exitosa. El tratamiento también puede tomar la forma de un aparato ortopédico para la espalda para aquellos pacientes que aún están creciendo. El aparato ortopédico está destinado a fomentar un camino más recto para que lo siga la columna en desarrollo, pero no necesariamente corregirá ninguna curvatura existente. Una práctica quirúrgica común para los casos graves consiste en fusionar varias vértebras para corregir la postura del paciente y evitar que se tuerzan o se doblen más. Los tratamientos quiroprácticos, como las manipulaciones de la columna, no parecen tener tasas de éxito muy altas.
La escoliosis puede parecer más siniestra de lo que realmente es. A menos que el grado de curvatura sea muy pronunciado, es posible que muchos niños y adultos nunca se den cuenta de que algo no funciona. Muchas escuelas ofrecen exámenes de detección de escoliosis gratuitos para los estudiantes más jóvenes, generalmente alrededor del octavo grado, y cualquier hallazgo positivo se informa directamente a los padres. Un médico de familia también puede evaluar a los pacientes jóvenes para detectar cualquier desviación lateral en la columna. Si la afección se descubre temprano y se toman medidas correctivas, los efectos de la escoliosis pueden controlarse, si no curarse.