¿Qué es un estimulador muscular eléctrico?

Un estimulador muscular eléctrico es un dispositivo diseñado para enviar un impulso eléctrico de baja frecuencia a un músculo. El dispositivo está diseñado para simular el pulso eléctrico orgánico que se origina en el sistema nervioso y envía una señal al músculo para que se mueva. Dichos dispositivos se utilizan para ayudar en la recuperación y rehabilitación de lesiones musculares y como ayuda para el entrenamiento de los atletas.

El científico Luigi Galvani descubrió en 1791 que la electricidad podría usarse para estimular o activar los músculos. Más investigaciones y desarrollos tecnológicos han identificado que el uso a largo plazo de un estimulador muscular eléctrico puede ayudar a construir y tonificar el tejido muscular. Se pueden utilizar diferentes frecuencias y niveles de estimulación para reducir la fatiga muscular y aumentar la producción de tejido muscular.

El impulso eléctrico de un estimulador muscular eléctrico hace que el músculo objetivo se contraiga y aumenta la temperatura muscular y la circulación de la sangre. La estimulación muscular eléctrica también se puede utilizar para tratar dolores de cabeza recurrentes, dolor de espalda y entumecimiento en las extremidades. Quiroprácticos de renombre utilizan este tratamiento en una variedad de afecciones, incluido el síndrome del túnel carpiano, atrofia muscular, espasmos musculares, ciática, lesiones relacionadas con el deporte y regeneración muscular.

Durante el tratamiento, las almohadillas se colocan sobre la piel en una posición correspondiente al área objetivo. Se desarrolla una sensación de hormigueo, similar a un masaje, a medida que aumenta la frecuencia eléctrica. Una sesión de tratamiento suele durar entre 10 y 15 minutos.

Los efectos secundarios de la estimulación muscular eléctrica pueden incluir enrojecimiento e irritación de la piel de corta duración, y puede haber dolor a la palpación en y alrededor del área objetivo durante varios días después del tratamiento. Las personas con dispositivos médicos implantados, como marcapasos, deben buscar un tratamiento alternativo, al igual que las mujeres embarazadas. Si las almohadillas se colocan incorrectamente, puede producirse un dolor de moderado a intenso si la carga eléctrica estimula un nervio.

Utilizado como ayuda para el entrenamiento atlético, un estimulador muscular eléctrico debe incorporarse a la rutina general de entrenamiento y puede usarse después de períodos de esfuerzo muscular intenso para alentar a los músculos a recuperarse más rápido. Cuando se usa como parte de un régimen de entrenamiento estructurado, la estimulación muscular eléctrica a menudo se enfoca en desarrollar rápidamente tejido muscular y alcanzar la fuerza máxima, lo que generalmente ocurre dentro de las 10 sesiones.

Las sesiones posteriores aportan poco a la forma de aumentar la fuerza y ​​el tejido. Por esta razón, muchos entrenadores recomiendan rutinas de fortalecimiento iniciales breves e intensas con rutinas de refuerzo breves cada seis meses. La estimulación diaria se puede incorporar a la rutina de entrenamiento para mantener la fuerza máxima y ayudar en la recuperación. Algunas personas afirman que los dispositivos de estimulación muscular eléctrica pueden ayudar a perder peso y ayudar a una persona a lograr los llamados abdominales. La Administración de Drogas y Alimentos de EE. UU., Que regula los dispositivos en Estados Unidos, no apoyó tales afirmaciones en 2010.