Instalar aislamiento en un ático es una buena manera de reducir el consumo y los costos de energía. Si su ático no está terminado, debe aislar el piso; si está terminado, haga las paredes y el techo. Los dos tipos principales de aislamiento son el aislamiento laminado o soplado. El primer paso para aislar un ático es seleccionar el aislamiento y calcular la cantidad necesaria siguiendo las recomendaciones para el clima donde vive. A continuación, prepare el ático, incluido el sellado de fugas de aire, como el área cerca de las escaleras del ático. Luego, siga cuidadosamente las instrucciones de instalación y complete el proceso.
Un ático sin aislamiento puede ser un gran desperdicio de energía, lo que permite que el calor se escape en el invierno y el aire acondicionado en el verano. Si tiene un ático sin terminar, el aislamiento debe instalarse en el piso entre las vigas para evitar la transferencia de calor entre el ático y el resto de la casa. Si es un ático terminado, actualmente o en el futuro, aísle las paredes y el techo para evitar la transferencia de calor con el exterior y mantener el espacio cómodo.
Los principales tipos de material para aislar un ático son el aislamiento enrollado o soplado. El aislamiento en rollo está construido como una alfombra de espuma o guata, y requiere equipo menos especializado para instalar. El proceso consiste simplemente en cortarlo al tamaño correcto y engraparlo en su lugar. El aislamiento soplado consiste en piezas sueltas y esponjosas de material. Puede ser instalado profesionalmente o puede alquilar una máquina de soplado y hacerlo usted mismo.
Una vez que haya seleccionado el material para aislar un ático, es importante calcular cuánto se necesita. Dependiendo del clima, se recomiendan valores R mínimos específicos para obtener el máximo beneficio. El valor R es una clasificación que indica la resistencia a la transferencia de calor proporcionada por el aislamiento. El aislamiento del ático con valores R más altos permite una menor transferencia de calor y conserva más energía. Una vez que haya elegido el valor R deseado, calcule la cantidad necesaria según las medidas del ático.
El siguiente paso para aislar un ático es preparar el espacio. Esto incluye sellar cualquier fuga de aire; preste especial atención al área cerca de las escaleras del ático y otras aberturas. Instale tapajuntas de metal alrededor de las fuentes de calor, como la chimenea o los artefactos de iluminación, para mantener al menos 3 pulgadas de espacio libre por razones de seguridad contra incendios. Si el ático no está terminado, considere colocar tablas sobre las que caminar para no atravesar el techo de la habitación de abajo.
Una vez que el espacio esté listo, aplique el material aislante. Con el aislamiento en rollo, el material debe cortarse para adaptarse al espacio en tiras largas y luego engraparse en su lugar. Primero debe instalarse en el espacio entre las vigas del piso; se puede colocar otra capa encima para una cobertura completa. Con aislamiento soplado, las bolsas de material aislante deben cargarse en la máquina una a la vez; luego, el aislamiento se expulsa de la máquina a través de una manguera. Recuerde dirigir la manguera de modo que el aislamiento se extienda uniformemente incluyendo todas las esquinas hasta que se haya aplicado el grosor deseado.