Las barras de fragancia son barras absorbentes que se han colocado en un frasco de aceite de fragancia. La barra extrae los aceites puros e intensos y su aroma se evapora en la habitación cuando golpean el aire. Debido al hecho de que no necesitan estar encendidas, se consideran más seguras que una vela perfumada desatendida. Los subproductos de la quema de varillas de incienso tampoco son un problema con las varillas de fragancia.
Los mejores aceites para usar en barras de fragancias son los aceites puros sin diluir con agua o solventes fuertes. Si las varillas se secan, se pueden dar la vuelta para que el extremo que estaba en el aceite quede expuesto al aire y se libere una nueva ola de fragancia. Hay muchos aceites que pueden usarse desde aquellos con propiedades de aromaterapia hasta aquellos con una función puramente perfumada. Hay recargas de aceite disponibles, pero un frasco estándar de 8 onzas (240 ml) debería durar algunos meses.
Las fragancias para el hogar se han convertido en una industria de mil millones de dólares estadounidenses y los consumidores gastan tanto en productos de fragancias para el hogar como en productos de limpieza para el hogar. Los difusores de dispositivos tecnológicos se han convertido en uno de los artículos más populares, pero los difusores de lengüeta más pasivos, como las varillas de fragancia, también están en demanda. Tener un hogar con un olor agradable durante todo el año se considera ahora una rutina y los consumidores están dispuestos a gastar dinero en estos productos para ellos mismos o como regalo.
El uso constante de tales fragancias en un ambiente cerrado como el hogar no siempre es deseable, especialmente cuando hay niños o mujeres embarazadas en la casa. Las fragancias pueden estar compuestas por cientos de ingredientes y se ha descubierto que aproximadamente una cuarta parte de ellos contienen sustancias tóxicas. Según el grupo ecologista Greenpeace, al menos 36 marcas de perfumes populares contienen productos químicos que son dañinos tanto para la salud como para el medio ambiente. Estos químicos se acumulan en el cuerpo y afectan negativamente la producción de ADN y esperma en los hombres. Tanto los ingredientes naturales como los artificiales pueden ser dañinos y provocar efectos adversos como asma y otros problemas respiratorios, dolores de cabeza e incluso cáncer.
Existe un peligro particular cuando se encienden productos para el hogar, como velas aromáticas y varitas de incienso, ya que el perfume se libera a través de una reacción química con la mecha encendida. Esto produce humo que puede producir carcinógenos, formaldehído y monóxido de carbono. Estos luego se llevan a los pulmones, se absorben a través de la piel e irritan los ojos, la nariz y la garganta. Las barras de fragancia tienen la ventaja de que no es necesaria tal reacción ya que la fragancia se libera debido a la exposición al aire.