El término «alto voltaje» se usa generalmente para describir una corriente eléctrica que es lo suficientemente fuerte como para dañar a los humanos y, a veces, también a los animales si entran en contacto con ella. No es una medida exacta de la electricidad, sino una advertencia que aconseja a las personas que mantengan la distancia. Es posible que la frase se vea más comúnmente en etiquetas y carteles, generalmente acompañada de otras advertencias o íconos que indican el riesgo de descarga eléctrica, lesiones y muerte. En general, todo lo que produzca más de 230 kilovoltios se considera de alto voltaje y extremadamente peligroso. Sin embargo, existen excepciones. Lo que hace que un voltaje sea lo suficientemente alto como para justificar estas precauciones suele ser tanto su presentación como su medición real. Las fuentes muy bien aisladas pueden transportar voltajes extremadamente altos, pero es posible que no requieran una advertencia si no hay riesgo para las personas. Alternativamente, las corrientes que generalmente podrían considerarse bastante débiles pueden considerarse peligrosas si atraviesan cables sin procesar, por ejemplo, o si son relativamente fáciles de acceder para los humanos de manera accidental o inadvertida.
Concepto basico
Los voltios son una unidad común de medida eléctrica. Más precisamente, representan el potencial eléctrico y se pueden usar para categorizar y determinar cuánta energía se necesita para una tarea, dispositivo o procedimiento determinado. Las cargas eléctricas son comunes en la naturaleza y, a bajas frecuencias, no representan una amenaza inusual para las personas o los animales. Sin embargo, la cantidad de energía que se necesita aprovechar para hacer cosas como alimentar redes eléctricas para ciudades y pueblos o proporcionar electricidad a edificios como hospitales suele ser inmensa. Este tipo de situaciones de voltaje concentrado es donde entran en juego las advertencias.
Peligro para los humanos
En casi todos los casos, la advertencia solo se emite en situaciones en las que es probable que los humanos corran peligro. Tan solo 40 voltios se pueden considerar de alto voltaje en las circunstancias adecuadas. Si se aplica a la piel humana, 50 voltios pueden hacer que el corazón fibrile. Esto significa que el corazón comenzará a experimentar latidos cardíacos rápidos e irregulares y que los músculos también pueden contraerse. Voltajes mucho más bajos pueden ser fatales si la piel está húmeda o mojada, porque el agua permite que la electricidad penetre en la piel a un ritmo más rápido. Esta es una de las razones por las que es peligroso usar aparatos eléctricos en o cerca de la bañera, por ejemplo, y también es la razón por la que la mayoría de las piscinas están cerradas durante tormentas eléctricas o relámpagos. Una herida abierta también puede permitir que la electricidad penetre más rápido en la piel.
Cómo se realiza la determinación de etiquetado
Dependiendo de la configuración, una serie de clasificaciones determinan el punto en el que la tensión representa un peligro. La Comisión Electrotécnica Internacional (IEC) ha establecido estándares seguros para aplicaciones eléctricas. Estos estándares establecen la cantidad aceptable de energía necesaria para tecnologías solares, semiconductores y electrodomésticos.
Si no hay energía almacenada y el aparato o la máquina no pueden producir corriente, no hay peligro de descarga eléctrica severa. Incluso si hay alto voltaje presente, es posible que no sea suficiente para causar lesiones graves a una persona. Por ejemplo, las chispas eléctricas estáticas se pueden medir a alrededor de 700 voltios, pero es posible que solo produzcan molestias durante unos segundos. Este tipo de salida eléctrica puede producir dolor, pero no suele afectar al corazón ni a los tejidos musculares.
Medición de voltaje
El voltaje generalmente se puede medir de dos formas diferentes. Las empresas de servicios públicos y los proveedores de electricidad a menudo miden sus corrientes periódicamente, tanto para garantizar la seguridad como los patrones de entrega consistentes. Los reguladores y los expertos en salud de la comunidad a veces monitorean las exposiciones a voltaje conocidas para promover el bienestar público y estar atentos a los riesgos para la salud asumidos por los empleados o técnicos. Los diferentes países tienen diferentes leyes con respecto a la inspección, la medición y el protocolo de seguridad.
En general, entrar en contacto con líneas eléctricas es una de las causas más comunes de descargas eléctricas fatales. Estas líneas pueden producir más de 50 voltios de electricidad y pueden ser extremadamente peligrosas. Los cables eléctricos enterrados bajo tierra también pueden producir suficiente electricidad para ser fatales si son perturbados por equipos de excavación.